Sanidad deja sin vacaciones a dos otorrinos del hospital de Teruel para poder atender pacientes, al menos, hasta mitad de junio

El Gobierno aragonés ha quitado las vacaciones a dos de los tres otorrinolaringólogos del hospital Obispo Polanco de Teruel para que, al menos, el servicio pueda seguir funcionando hasta mediados de junio. La medida permitirá citar a entre 80 y 90 pacientes de los cerca de 800 que permanecen en lista de espera. A 200 de ellos les fue anulada la consulta hace pocos días ante la previsión de que a principios de este mes ya no hubiera ningún especialista, pues uno de ellos, con plaza en propiedad, se traslada en los próximos días a Zaragoza y los otros dos, con contrato de interinidad, han decidido irse a trabajar a otras comunidades autónomas.

Los dos interinos, que ya habían iniciado su periodo vacacional antes de trasladarse al nuevo destino laboral, se han quedado sin libranza por necesidades del servicio, si bien la DGA les paga el salario correspondiente.

La incógnita reside ahora en saber qué pasará con el Servicio de Otorrinolaringología (ORL) de Teruel a partir de mediados de junio, cuando los tres especialistas se hayan ido, pues tras el último llamamiento a profesionales de Aragón la semana pasada no hubo nadie que se interesara por estas plazas.

El Servicio Aragonés de Salud ha puesto anuncios en el periódico de tirada nacional El País en un intento de encontrar otorrinos que quieran trabajar en el Obispo Polanco. "Se está buscando por distintos sitios", subrayaron este lunes desde el Departamento de Sanidad del Gobierno aragonés, agregando que hasta mitad de junio dos otorrinos tienen contrato con el centro sanitario turolense.

La jefa del Servicio de ORL, Teresa Lahoz, que deja su puesto para irse a Zaragoza, cansada –según ha explicado en varias ocasiones– de continuos cambios de compañeros de plantilla, apunta que la única opción para no cerrar la unidad es "que los 41 otorrinos que tiene el Gobierno aragonés en Zaragoza vengan a Teruel, de tres en tres, por periodos de un mes, para atender a la población".

Lahoz advierte de que probablemente resulte muy difícil encontrar otorrinos para Teruel, pues se trata de una especialidad médica deficitaria y, además del Obispo Polanco, "otros seis o siete hospitales del país están buscando también este tipo de especialistas". La todavía jefa del Servicio de ORL en Teruel explica que la crítica situación por la que atraviesa el servicio ha generado "una gran preocupación" entre los pacientes, quienes preguntan continuamente "quién les atenderá cuando aquí no haya nadie".

No solo escasean los otorrinos en la provincia de Teruel. El concurso de traslados que se ha desarrollado en las últimas semanas deja un 11% de plazas sin cubrir repartidas por distintas especialidades médicas.