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La crecida del Mijares obliga a trasladar el colegio de Los Ramones a Olba
El barrio es inaccesible para vehículos debido a la avenida del río y sus vecinos reclaman una solución definitiva.
El colegio del barrio de Los Ramones, con dos aulas para niños de tercero, cuarto, quinto y sexto cursos de Primaria, cierra este jueves sus puertas para trasladarse temporalmente a la cabecera del municipio, Olba, donde están el resto de las clases de Infantil y Primaria. La medida se adopta ante la imposibilidad de acceso rodado a la pedanía debido a la crecida del río Mijares a raíz de las últimas lluvias.
El vado que permite a los vehículos cruzar el cauce del río estaba sumergido este miércoles bajo más de 20 centímetros de agua con una fuerte corriente, lo que ha impedido a los escolares llegar en coches hasta Los Ramones. Los 25 niños que acuden a clase en esta pedanía han cruzado el Mijares a través de una pasarela peatonal que sigue operativa, aunque algunos padres denuncian la inseguridad de esta alternativa.
El Ayuntamiento ha acordado cerrar temporalmente la escuela de Los Ramones y trasladar sus dos aulas a Olba por "precaución", como explica el alcalde, Federico Martín. Una de las clases se acondicionará en la biblioteca pública y otra en un aula disponible en el colegio de Olba. Martín aclara que la duración del traslado dependerá de la evolución de la crecida del Mijares, pero señaló que podría alargarse hasta el viernes o, como muy tarde, hasta el próximo lunes.
El alcalde ha comunicado la incidencia a la Subdelegación del Gobierno y reitera la "necesidad" de construir un puente sobre el Mijares que garantice la accesibilidad a Los Ramones, un proyecto que distintas administraciones decidieron impulsar en mayo de 2019, pero que sigue sin arrancar. Martín señala que la pedanía tiene "vida" con 25 vecinos y no es admisible que los problemas de comunicación se repitan "con cada temporal".
Una vecina de Los Ramones, Sonia Martínez, ha reclamado una solución definitiva que garantice el acceso al barrio, porque los cortes de la única carretera de entrada y salida se reproducen con cada racha de lluvias. Señala que varios vecinos no han podido acudir a sus trabajos al no poder cruzar el vado con sus coches.
La vecina denuncia que "desde hace año y medio" los vecinos no saben "nada" sobre el puente que se anunció para asegurar las comunicaciones.
