El CV Teruel, líder en la tabla, se ha quitado este sábado el mal sabor de boca tras la derrota copera sufrida la semana pasada venciendo en casa al Arenal Emevé de Lugo, en novena posición. Lo ha hecho en un emocionante partido de Superliga en el que los dos equipos han peleado cada punto con todas sus fuerzas. No obstante, la resaca después del torneo del KO y las bajas del opuesto Filip Gavenda y del receptor Mariano Vildosola han pasado factura al cuadro turolense, que ha tenido que remar muy duro para ganar al rival y llevarse los tres puntos, dejando el marcador a 3-1. 

La victoria refuerza a los turolenses en cabeza de la clasificación, al sumar 61 puntos con una diferencia de 6 sobre su seguidor inmediato, el CV Guaguas.  Además, le acerca a su objetivo de terminar primero en la tabla en la liga regular y lograr el factor cancha de cara a los play off en la fase eliminatoria de la Superliga. 

Los locales se llevaron el primer set por muy poca diferencia, 25-23. Aunque arrancaron el partido yendo ligeramente por delante de los lucenses, estos defendieron sin descanso y con acierto y lograron empatar 20-20, si bien en los minutos decisivos los turolenses supieron imponerse.

A la plantilla naranja, sin embargo, le costó coger el ritmo en la segunda manga, que acabó perdiéndola con el marcador a 22-25. En la tercera, los turolenses abrieron brecha y, no sin esfuerzo, lograron una ventaja desde el inicio que supieron mantener hasta el final, cerrando el marcador a 25-22. 

Muy distinto fue el cuarto set, en el que la escuadra naranja, decidida a cerrar el partido a su favor por la vía rápida, entró en tromba sin dar opción al visitante y demostrando que, si quiere, puede derrotar a cualquier equipo. En pocos minutos, el luminoso quedó a 25-13, cayendo el choque del lado de los turolenses.

El entrenador del Arenal Emevé, Diego Taboada, atribuyó la derrota a las bajas en sus filas, lo que le habría obligado a sacar a la cancha "a chiquillos", en referencia a jugadores de la categoría juvenil con no más de 17 años de edad que, no obstante, hicieron un buen partido. Admitió que en el último set, ante el embate de los turolenses, no pudieron hacer nada.

El técnico del CV Teruel, Miguel Rivera, por su parte, ha destacado que el equipo ha conseguido su objetivo, que es sumar tres puntos a su casillero y seguir siendo líder indiscutible en la tabla. Ha reconocido que, aunque ya lo esperaban, el Emevé "ha defendido todo lo que ha podido defender y a nosotros nos ha costado puntuar". "El rival también juega y lo ha hecho muy bien", ha subrayado.

El preparador naranja ha explicado, en defensa de su equipo, que este viene de atravesar su semana más difícil, no tanto por la derrota en el torneo de la Copa del Rey sino por las lesiones sufridas por Gavenda y Vildosola, que ha complicado los entrenamientos. Aunque no le gusta personalizar, ha calificado de "imparable" a Jordi Ramón, que siendo receptor ha tenido que jugar de opuesto "y ha hecho un partido soberbio".