El nuevo Plan General de Teruel prevé ascensores para comunicar barrios en la calle Valparaiso y el parque de San Antón

El avance del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que el Ayuntamiento de Teruel aprobará este mismo mes contempla la construcción de dos nuevos ascensores entre las calles Valparaiso y Cuevas del Siete y entre el parque de San Antón y la avenida de Sagunto para mejorar la accesibilidad de la ciudad. Estos enlaces mecánicos complementarán los ya existentes entre el barrio de San Julián y el Centro Histórico y en el Óvalo, además del ya proyectado entre la calle Bajo los Arcos y el Centro Histórico.

El avance, que se someterá al dictamen de la Comisión de Urbanismo el próximo viernes, presupuesta el ascensor que comunicará el parque de San Antón, en el barrio de San Julián, con la avenida de Sagunto, en el Ensanche, en 1,75 millones de euros. Propone su ejecución en el segundo quinquenio de ejecución del PGOU. Por el contrario, elimina la previsión de PGOU vigente, de 1985, de un elevador junto al Viaducto Viejo.

El equipo redactor explica que «se propone el incremento del número de ascensores en aquellos barrios que tienen una conexión deficiente con el Centro Histórico, para salvar las servidumbres topográficas que los segregan física y socialmente».

La incorporación de los dos ascensores es una de las novedades del documento tras someter una primera propuesta a la valoración de los agentes sociales, colectivos vecinales y colegios profesionales e incorpora algunas de las propuestas recibidas, como tener en cuenta la construcción de la autovía A-40 y del corredor ferroviario Cantábrico-Mediterráneo. El avance que se someterá a información pública tras su aprobación por el pleno a finales de mes recoge reservas de suelo para una estación intermodal y las ampliaciones del aeropuerto y de la Plataforma Logística e Industrial (Platea) asociadas a la proximidad de la A-40 y del futuro eje ferroviario.

Otra de las novedades respecto al avance que se sometió a consulta es la incorporación de dos nuevas zonas verdes junto al río Turia y que estarán situadas entre el tendido ferroviario y el río, por un lado, y en el margen derecho junto al puente de la Equivocación. Esta mancha verde, de 30.385 metros cuadrados, se suma a otras incorporaciones –la principal el parque de las Arcillas, con 164.000 metros cuadrados– y parques ya existentes hasta totalizar una superficie de 419.126 metros cuadrados.

5.972 viviendas nuevas previstas en 20 años

El avance mantiene las previsiones iniciales de diseñar una ciudad compacta al concentrar las cinco manchas de suelo urbanizable para uso residencial en torno a la Vía Perimetral hasta totalizar 2.931 viviendas, que unidas a las bolsas de suelo urbano no consolidado totalizan las 5.972 viviendas nuevas previstas en los 20 años de vigencia del PGOU, de las cuales 611 serían unifamiliares y el resto en bloques.

El avance prevé un incremento de población del 0,47% anual para pasar de los 35.691 de 2018 a 39.606. Contempla un sobrante de 1.518 viviendas en las dos décadas de vigencia del PGOU.

La principal mancha residencial en suelo urbanizable, denominada Aljezares, se localiza en el extremo oriental de la Vía perimetral y contará con suelo para 1.181 viviendas, seguida de San Julíán este con 766, Ollerías del Calvario con 381, Arrabal este con 312 y la ampliación de Las Viñas con 291 –en este caso todas son unifamiliares–.

El nuevo PGOU sustituirá al de 1985, que preveía suelo para 66.292 habitantes, una cifra que 35 años después se ha quedado en poco más de la mitad. El borrador del avance recibió las propuestas de distintos colectivos, entre ellos los colegios oficiales de ingenieros de caminos y de arquitectos, la Federación de Asociaciones de Vecinos y la asociación Acacias. Algunas de ellas han sido tenidas en cuenta por la oficina redactora, creada expresamente por el Ayuntamiento tras dos intentos fallidos de poner al día el planeamiento urbanístico que consumieron medio millón de euros.