El Museo de Teruel batió en 2019 su récord de público

El Museo de Teruel, dependiente de la Diputación Provincial, batió en 2019 su récord de visitantes. Las 43.845 entradas acumuladas han superado en 2.377 personas el máximo histórico alcanzado en 2008, un año muy especial por la celebración de la Exposición Internacional de Zaragoza. La cifra de visitantes de 2019 supone un incremento del 12,35 % respecto al año anterior y del 31,5 % respecto al promedio de los últimos 10 años.

Entre las distintas actividades desarrolladas en el Museo de Teruel durante 2019, con seis exposiciones temporales y otras dos organizadas por otras entidades, destaca “De gira por España. Tiziano”. La exposición del cuadro “Venus recreándose con el Amor y la Música” sumó al Museo de Teruel a la celebración del 200 aniversario del Museo Nacional del Prado y tuvo una excelente acogida, reflejada en los más de 8.000 visitantes que atrajo en un mes.

El diputado delegado de Cultura de la Diputación de Teruel, Diego Piñeiro, se ha mostrado "muy orgulloso de la labor realizada durante este año y el número de visitantes así lo refleja. Es un dato muy positivo que se debe a la gestión que se ha hecho, en el que, obviamente, la exposición de Tiziano ha sido la joya de la corona”.

Además, durante 2019 se intensificaron el número de grupos que visitan el Museo de Teruel dentro del programa de visitas guiadas y talleres didácticos, procedentes en su mayor parte de centros escolares de la provincia de Teruel. Se realizaron 64 visitas guiadas con un total de 1.805 participantes. En cuanto a los grupos, visitaron el museo un total de 5.580 personas en 208 grupos, 94 de ellos grupos escolares con 2.616 alumnos, y otros formados por asociaciones empresariales, colectivos sociales y grupos turísticos, con un total de 2.964 participantes.

En los talleres didácticos participaron 24 grupos con un total de 532 escolares. Los talleres didácticos realizados han sido el taller sobre técnicas cerámicas en la antigüedad y el taller sobre mosaicos romanos, dentro del programa Teruel Inmersión Family, dirigidos a familias norteamericanas.

En conjunto, las exposiciones temporales han sido visitadas por 40.348 personas. En los primeros meses del año pudo contemplarse “De muñecas, mecanos y juegos reunidos”, organizada por el Museo de Juguetes de Albarracín. En marzo se inauguró la exposición “Fernando Romero. Paisajes especulativos”, una propuesta que profundizaba en el paisaje como construcción mental, tanto virtual como real, transformada por la mira contemporánea del artista turolense afincado en Madrid. Además el museo turolense acogió la exposición “Niños esclavos. La puerta de atrás” de la fotoperiodista zaragozana Ana Palacios, organizada por la Fundación Térvalis, o “Skid Row 08001” de Sasha Asensio en el marco del Festival Internacional Teruel Punto Photo.

Como complemento a la exposición de Tiziano, el Museo de Teruel organizó una exposición paralela bajo el título “Vadevenus. Artistas turolenses se recrean con Tiziano”, donde creadores de diferentes disciplinar reinterpretaron los temas tratados en el cuadro “Venus recreándose con el Amor y la Música”. También se celebraron dos muestras monográficas: “Garbo Festival”, en colaboración con el Grado de Bellas Artes de la Universidad de Zaragoza, y la exposición de los trabajos presentados por alumnos turolenses al Premio San Jorge de Pintura, organizado por el área de Cultura de la Diputación de Teruel.

Para Diego Piñeiro, “poder contar con la obra de Tiziano y del Museo Nacional del Prado, el hecho de que la pinacoteca nos haya considerado uno de los mejores museos de España, nos da un prestigio que vamos a aprovechar para seguir trabajando y colaborando con diferentes museos y entidades y contar con las mejores exposiciones temporales”.

En estos momentos, y hasta el 19 de enero, todavía se puede disfrutar de la muestra bianual de cerámica creativa “CERCO 19. XVI Premio Internacional de Cerámica Contemporánea”, una selección de 29 piezas procedentes de diferentes países, con técnicas y diseñadores innovadores.

Durante 2019 ingresaron en el Museo de Teruel 1.078 bienes culturales, la mayor parte destinados a las colecciones arqueológicas (808), seguidas de las de carácter etnográfico (94), al fondo de Documento gráfico (174) y finalmente a las de Bellas Artes (2). Por forma de ingreso, corresponden 1 a adquisiciones, 51 a donaciones, 790 proceden de excavaciones, prospecciones y hallazgos casuales y 235 al fondo antiguo.

Todos los nuevos ingresos, además de un conjunto importante de la colección ya existente, han sido catalogados en la aplicación informática para la gestión museística “Domus”. Se han identificado, renombrado y catalogado 1.423 fotografías de piezas del museo, incorporándolas, además de a nuestra base de datos, al portal Ceres del Ministerio de Cultura para su acceso y visualización pública.

Respecto a la conservación y restauración de piezas, en 2019 se trataron135 piezas de carácter arqueológico, bibliográfico y artístico pertenecientes al museo. A estas intervenciones hay que añadir las realizadas ocasionalmente en obras ajenas a la colección, acogidas en exposiciones temporales. Se intervino también en la Casa de la Comunidad, mediante la limpieza de los sillares de los pesebres del sótano, que presentan un proceso de disgregación a causa de la cristalización de las sales de la piedra.

El diputado delegado de Cultura ha destacado que “mucha parte del trabajo del Museo de Teruel es una parte oculta alrededor del archivo y el almacenamiento de obras que, por desgracia, los turolenses no pueden disfrutar todavía. Por eso desde la Diputación seguimos trabajando en la ampliación del Museo. Este año volvemos a contar con una importante cantidad del FITE para seguir trabajando en esa ampliación que, para nosotros, es un gran objetivo”.

El control del estado de conservación de obras se ha hecho extensivo a aquellas que son acogidas por el museo en exposiciones temporales, bien de obras pertenecientes a artistas contemporáneos o cedidas por otras instituciones museísticas, como el cuadro de Tiziano del Museo Nacional de El Prado.

Por otra parte, durante las campañas de excavación de los yacimientos de La Caridad en Caminreal y el Cabezo de San Pedro en Oliete se realizaron distintas actuaciones necesarias para la conservación de los hallazgos muebles e inmuebles. Con el objetivo de preservar las estructuras arquitectónicas puestas al descubierto en campañas anteriores, se trabajó en la renovación de los sistemas de protección en La Caridad, mientras que en el yacimiento ibero de San Pedro se procedió a cubrir provisionalmente los túmulos funerarios y el horno de cerámica excavados en esta campaña. Asimismo, se procedió a la reparación de estructuras de contención del yacimiento ibérico de El Palomar, desmoronadas a causa de las lluvias.

El Museo de Teruel ha seguido apostando durante 2019 por las actividades arqueológicas, de acuerdo a sus posibilidades. Los trabajos sobre el terreno se centraron en el poblado ibérico de Cabezo de San Pedro, en Oliete, en La Caridad de Caminreal y en el desarrollo del proyecto “Estudio del poblamiento andalusí en el sur de Aragón”. Además, continuó la labor de inventario y estudio de los objetos procedentes del yacimiento romano de La Caridad y se han sentado las bases para iniciar las excavaciones en el yacimiento de Els Castellans, en Cretas.

En julio de 2019 se llevó a cabo la IV campaña de excavaciones en el poblado ibérico del Cabezo de San Pedro. La actuación estuvo financiada por Parque Cultural del Río Martín, el Ayuntamiento de Oliete y la Diputación de Teruel, a través del Museo de Teruel, y contó con la participación de cinco estudiantes y licenciados de la especialidad de arqueología.

Los trabajos se enfocaron en dos zonas, localizadas fuera del área fortificada y determinadas por los resultados obtenidos en 2018. Los objetivos eran ahondar en el conocimiento de la actividad productiva con la excavación del horno de cerámica ibérica en toda su superficie, e iniciar sondeos en la necrópolis. Del horno se pudo describrir la planta completa, documentándose el muro perimetral. Los sondeos en la necrópolis permitieron descubrir una ocupación del yacimiento anterior a lo que se pensaba y que estaría en torno al siglo V antes de Cristo.

Durante el mes de agosto y mitad de septiembre de 2019 también se desarrolló la XXXV campaña de excavaciones en la ciudad romano republicana de La Caridad, en Caminreal. La actuación fue financiada íntegramente por la Diputación de Teruel a través del Museo de Teruel. Intervienieron 3 arqueólogos, 2 restauradores y 2 auxiliares de excavación.

Los trabajos se desarrollaron en la Insula III, continuando la excavación en profundidad de este sector iniciado anteriores campañas. Se ha podido ahondar en la caracterización de la vivienda con la excavación total de la estancia 5, descubriendo un gran espacio que corresponde a un modelo de estancia no documentada hasta ahora en la ciudad y que, como la mayoría de los excavados en el yacimiento, concentraba una gran cantidad de ajuares domésticos, tanto cerámicos como metálicos.

El segundo espacio urbano en el que se intervino fue la Calle III, con una superficie excavada de 30 metros cuadrados. Proporcionó también una gran cantidad de materiales e información sobre la configuración de la estructura de este vial, formado por calzada y aceras delimitadas con grandes sillares.

Fruto de la colaboración del Museo de Teruel con el Consorcio Patrimonio Ibérico de Aragón, durante 2019 se consideró conveniente retomar el estudio del poblamiento ibérico en la comarca del Matarraña, donde se realizaron las primeras investigaciones sobre la cultura ibérica aragonesa a principios del siglo XX.

Els Castellans, en Cretas, ha sido el yacimiento elegido, ya que constituye uno de los mejores ejemplos aportados por la investigación arqueológica pero, sin embargo, sigue presentando en la actualidad una serie de incógnitas en su cronología, fases de ocupación, extensión o características, otorgándole todavía un gran potencial investigador, abierto a numerosas líneas de trabajo. El Museo de Teruel ha encargado el proyecto de intervención arqueológica, con el fin de establecer los objetivos para una próxima actuación en el poblado, declarado Bien de Interés Cultural en 2001.

En cuanto al proyecto de estudio del poblamiento andalusí, los trabajos durante 2019 se desarrollaron fundamentalmente en la comarca de Gúdar–Javalambre, mediante la prospección y revisión de más de 150 asentamientos de esta época. Se han documentado las estructuras visibles, revisado estratigrafías y analizado los conjuntos materiales con el fin de valorar la evolución del poblamiento en esta comarca.

Por otra parte, desde el Museo se han asumido también los trabajos de conservación y mantenimiento de los principales yacimientos arqueológicos visitables en la provincia de Teruel, como La Caridad (Caminreal), Alto Chacón (Teruel), La Loma del Regadío (Urrea de Gaén), El Palomar y el Cabezo de San Pedro (Oliete), y colaborado con otras entidades en el desarrollo de actividades de investigación, conservación y difusión.

“Todo el trabajo tan importante que realiza el Museo de Teruel, sus trabajadores, en diferentes excavaciones hace que cada vez el este museo tenga mayor capacidad de exposición de descubrimientos muy interesantes”, ha asegurado Diego Piñeiro. “Es de alabar el trabajo que se realiza y así lo resaltan la cantidad de veces en las que los técnicos del Museo participan fuera de Teruel en diferentes congresos y ponencias para exponer estos nuevos hallazgos”.

Hay que resaltar la participación de los técnicos del Museo de Teruel en diversos congresos y reuniones científicas (XII Seminario de Mosaicos Romanos. Workshop Internacional sobre los mosaicos romanos en el espacio rural: Investigación y puesta en valor, celebrado el 5 y 6 de marzo en Madrid, y III Congreso de Arqueología y Patrimonio Aragonés (CAPA), celebrado los días 14 y 15 de noviembre en Zaragoza), así como su presencia en la Red de villas romanas de Hispania, que coordina las intervenciones en este tipo de asentamientos y en la que se incluye la villa de La Loma del Regadío de Urrea de Gaén, o en el Consorcio de Iberos en Aragón.

La Biblioteca del Museo es uno de los instrumentos más importantes en el cumplimiento de las funciones de esta entidad, ya que proporciona información especializada tanto a los técnicos del museo como, sobre todo, a todo el conjunto de estudiantes e interesados en las materias vinculadas con el patrimonio cultural. Durante 2019 ingresaron 256 nuevos ejemplares, de los que 253 son monografías, 2 publicaciones periódicas y 1 material especial. Los ingresos proceden por compra (59), donación (133) e intercambio (64). Se efectuaron 501 consultas y 182 préstamos externos a investigadores. Todos los ingresos fueron registrados y catalogados, generando 953 registros nuevos.

Por otra parte, se procedió a la actualización de la Base de datos del Catálogo de los Fondos Bibliográficos del Museo, mediante la implantación de la versión FMP 17. Esta actualización ha supuesto un notable trabajo de desarrollo de nuevas prestaciones y configuración, así como la primera fase para poder facilitar la consulta de la base de datos on line.

Debido al incremento de volúmenes y con el fin de prestar un mejor servicio, se reorganizaron los fondos en sala y ampliado de nuevo las estanterías de manera notable, ocupando la denominada sala de lectura. Todos los fondos de la sección de Arte, Historia del Arte, Arte Contemporáneo y catálogos de exposiciones fueron trasladados y ordenados en el nuevo espacio de la biblioteca.

Además, continuó la revisión, limpieza, restauración y confección de estuches especiales para obras del Fondo Antiguo. Se ha terminado con un total de 225 estuches específicos, a medida de cada libro o material.

Por último, es importante destacar el préstamo de obras y objetos pertenecientes al Museo de Teruel para su inclusión en exposiciones temporales de otras entidades. Como la Cantimplora de Los Tejadillos de Albarracín, que forma parte de la muestra “Las artes del metal en al-Andalus”, organizada por el Museo Arqueológico Nacional y Acción Cultural Española. La pieza ya se puede ver en la sala de exposiciones temporales del museo madrileño hasta el 26 de abril de 2020 y, seguidamente, la exposición completa se trasladará al Museo Arqueológico de Alicante, por lo que el préstamo se prolonga hasta octubre de 2020.

Esta muestra coincide en el tiempo con la exposición “La Granada Zirí y el Universo Bereber”, que tiene lugar desde el pasado 5 de diciembre y hasta el 21 de abril en el Palacio Carlos V del conjunto histórico de La Alhambra. Allí se encuentra la réplica de la Cantimplora de los Tejadillos de Albarracín y 11 piezas de cerámica y bronce procedentes del castillo de esta ciudad medieval que el Museo de Teruel tiene depositadas habitualmente en el Museo de Albarracín.

En ambos casos, se ejerció el control del estado de estos fondos en movimiento, incluyendo el desplazamiento para certificar su adecuada instalación.

Conforme a los criterios de

¿Por qué confiar en nosotros?