Teruel pierde 518 votantes en seis meses

La provincia de Teruel ha perdido 518 electores desde las anteriores elecciones, celebradas el pasado 28 de abril, hace solo seis meses. Las bajas en el censo por fallecimientos y traslados duplican a las 563 altas experimentadas por la llegada de nuevos residentes y jóvenes que han cumplido los 18 años en el último medio año.

La galopante despoblación y envejecimiento que sufre la provincia ha provocado una caída del número de votantes en más de medio millar, hasta quedarse en 107.216 electores. Los datos los ha dado a conocer este martes el subdelegado del Gobierno en Teruel, José Ramón Morro, al presentar el dispositivo montado por la Administración para los comicios del 10-N. Morro ha reconocido que el dato del retroceso en el número de electores es “significativo”.

El operativo dispuesto por el Gobierno para las votaciones incluye habilitar 284 locales con 333 mesas electorales, dos más que el 28 de abril con la incorporación de una urna más en el instituto Segundo de Chomón de Teruel y en el Mercado de Alcañiz. En total, 2.997 personas son miembros de las mesas electorales, de los cuales 1.998 son suplentes.

La transmisión de los resultados al centro de tratamiento de datos correrá a cargo de 263 funcionarios, 70 de ellos equipados con tablets. El despliegue de las fuerzas de seguridad incluye a 400 guardias civiles, 97 policías nacionales y 45 policías locales.

Catorce candidaturas al Congreso se disputarán los tres diputados en liza y 13 al Senado competirán por cuatro escaños en la Cámara Alta. Para votar, se repartirán 804.000 papeletas al Congreso y 97.000 al Senado. El Gobierno central habilitará nueve líneas de autobús para que los residentes en núcleos que no cuentan con ningún colegio electoral puedan acudir a depositar sus votos. Los pueblos que no tienen mesas electorales propias son pedanías, la mayoría de ellas en las tierras altas de la provincia.