españa vaciada
"¡Levantad los carteles, que se vean bien!"
Los diez centros de la Agrupación Turolense de Asociaciones de Discapacidad Intelectual (Atadi) secundan el paro de cinco minutos para reclamar medidas contra la despoblación.
"Levantad bien los carteles, que se vean!". Irene Arroyas, la directora del centro ocupacional y centro de día de la Agrupación Turolense de Asociaciones de Discapacidad Intelectual (Atadi) en Teruel, ha animado al centenar de usuarios del establecimiento a que esgriman las hojas de la España Vaciada que reclaman soluciones a la despoblación.
Arroyas ha explicado que, para "atender con dignidad" a cualquier discapacitado de la provincia, la asociación recorre con sus vehículos 1.800 kilómetros diarios para acercar a los beneficiarios a alguno de los diez centros asistenciales de Atadi, donde ofrecen servicios de centro de día, residencia y centro ocupación
La responsable de Atadi resalta el sobreesfuerzo que comporta atender la discapacidad en una tierra despoblada mientras que la Administración mira para otro lado y “no contempla nada” para atender esta situación. Al establecimiento de Teruel capital llegan, por ejemplo, usuarios de Alfambra, Perales del Alfambra, Cella y Villarquemado que no disponen de alternativas asistenciales en sus pueblos.
"Nuestro objetivo es que un discapacitado de cualquier pueblo reciba el mismo servicio que disfrutaría en una ciudad", dice la directora.
Tras la lectura de un manifiesto a las puertas de Atadi, el aplauso de residentes y empleados ha cerrado el acto de adhesión a la movilización de la España Vaciada convocada bajo el eslogan "Yo paro por mi pueblo".
Los diez centros de Atadi repartidos por todas las cabeceras comarcales, salvo Hijar, han parado este viernes para reclamar soluciones a la despoblación que tan directamente les afecta. En algunos casos los usuarios se han sumado a las concentraciones convocadas en las plazas y en otros se han concentrado delante de sus propias sedes. Mila Herrera, portavoz de Atadi, ha recordado que esta entidad social “tiene que soportar más costes y dificultades añadidas para atender a las personas con discapacidad por culpa de la dispersión, porque quiere llegar al pueblo más pequeño donde una persona necesita atención”.
