teruel

El juez alarga el arresto del conductor temerario al que dieron el alto a tiros

El joven confesó este martes los hechos en el juzgado y se mostró arrepentido.

El joven detenido en Teruel por huir con su coche y que fue frenado a tiros por la Guardia Civil.
El detenido, a su llegada este martes a los juzgados de la capital turolense para declarar ante el juez.
Jorge Escudero

El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Teruel decidió prorrogar este martes hasta las 72 horas la detención de I. G. P., el joven de 23 años que el pasado domingo por la mañana protagonizó una peligrosa huida tras saltarse un control policial a la entrada de Teruel. El temerario conductor atravesó varias fincas agrícolas y circuló a gran velocidad por la A-226, a su paso por Cedrillas. Para conseguir detenerle, la Guardia Civil tuvo que disparar a las ruedas de su vehículo y romper los cristales del mismo, ya que el fugitivo se había encerrado dentro. En el forcejeo, siete agentes resultaron heridos leves.

El magistrado, Jerónimo Cano, que interrogó al joven por la mañana, dictó después un auto en el que explica que el mantenimiento de la detención es necesario para indagar sobre "la forma y circunstancias en que acaecieron los hechos", a fin de determinar la magnitud de lo ocurrido. Señala que, antes de decidir sobre la situación personal del detenido –si lo deja en libertad o lo envía a prisión provisional–, es preciso que declaren los siete agentes perjudicados y los testigos presenciales. Se está a la espera, además, del resultado del registro del vehículo accidentado por una unidad policial canina.

A I. G. P., que dio positivo en cocaína, cannabis y metanfetamina, según recoge el auto judicial, se le imputan dos delitos contra la seguridad vial en su modalidad de conducción temeraria y bajo la influencia de drogas tóxicas, estupefacientes y sustancias psicotrópicas, así como un tercero de atentado, resistencia y desobediencia a agentes de la autoridad. Por último, se le investiga por haber cometido siete delitos de lesiones de carácter, a priori, leve.

Fuentes judiciales indicaron que, en su declaración ante el juez, el joven reconoció haber sido el autor de los hechos y se mostró arrepentido. I. G. P. llegó a los juzgados poco antes de las 10.00, esposado y en un vehículo de la Guardia Civil. Tras el interrogatorio, hacia las 14.30, fue conducido de nuevo a los calabozos de la Comandancia de la Benemérita. Muy afectados, sus familiares le aguardaban a la salida del Palacio de Justicia para darle ánimos.

Fuentes próximas a la investigación relataron que la mañana del domingo, sobre las 9.00, el joven fue visto con su coche, parado en un camino rural de Allepuz, por una patrulla de la Guardia Civil. Al ver que los agentes se acercaban hacia él, I. G. P. inició una veloz huida a través de un campo de labor y cruzando un río hasta salir a la carretera A-226 en dirección a Teruel. Al parecer, su familia había pedido ayuda a la Policía porque no lograba localizarlo, pero no estaba siendo perseguido por ello. En su fuga, podría haber cruzado la población de Cedrillas a unos 100 kilómetros por hora y circular por la carretera a más de 140 kilómetros por hora, añadieron estas fuentes. En el interior de su coche se encontró una pequeña cantidad de hachís.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión