La industria del porcino hace de La Mata de los Olmos un oasis de empleo
Un matadero, granjas y secaderos generan trabajo y atraen vecinos tras el cierre traumático de las minas de carbón en los años 70 del siglo XX
La Mata de los Olmos comprueba ahora cómo la apuesta por potenciar un sector, el porcino, después del traumático cierre de sus minas de carbón a finales de los años 70 del siglo XX, ayuda a asentar población. La pequeña localidad del Bajo Aragón, con 250 habitantes, no tiene casi parados y recibe nuevos habitantes.
El municipio vio en la inversión en la industria cárnica del cerdo un antídoto contra los efectos del cierre de los yacimientos y ahora, gracias a la iniciativa privada y al apoyo del Consistorio, comienza a ver los resultados de este desafío: la apertura de granjas, mataderos y secaderos que dan empleo a habitantes y vecinos de poblaciones colindantes.
"Podemos decir que no tenemos paro y que hemos aumentado la población en los últimos años", explica su alcaldesa, Silvia Gimeno, quien relata que en los últimos meses La Mata de los Olmos ha acogido a seis nuevos habitantes.
Para poner en valor un sector que los ha convertido en un "modelo de pueblo", la localidad organizó hace algunos días La Mata Porc, una feria pionera en el calendario bajoaragonés en la que diversos agentes transmitieron la importancia que el porcino ha tenido para el desarrollo económico del pueblo.
La Mata tiene el ciclo completo en lo relacionado con el cerdo, desde la producción de lechones hasta secaderos para hacer jamones y embutidos. La empresa que gestiona el matadero pondrá en marcha pronto un segundo turno de trabajo que permitirá crear una veintena de empleos y el Ayuntamiento negocia para intentar que se priorice la entrada de los desempleados del pueblo.
La actividad en Aragón Matadero se ha estabilizado desde que el grupo alemán Tönnies, uno de los mayores productores cárnicos de toda Europa, consiguiera hacerse con la gestión de las instalaciones.
