La Guardia Civil acaba de poner en marcha una nueva unidad en la provincia especializada en labores preventivas de la delincuencia, como la realización de controles de carreteras en puntos especialmente conflictivos para el tráfico rodado o por consumo de estupefacientes. El nuevo equipo se pone en marcha en la estela de la agria polémica desatada el pasado diciembre en la provincia por la falta de efectivos en los cuarteles a raíz del triple asesinato cometido por el pistolero serbio Norbert Feher alias Igor el Ruso en Andorra.

Desde la Comandancia de Teruel descartaron cualquier relación entre la activación de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia (Usecic) y las críticas sociales y políticas por la escasez de guardias civiles en la provincia. Según una portavoz de la Comandancia, la Usecic se ha constituido en la provincia cuando le ha llegado el turno en un proceso de despliegue que empezó por las provincias más pobladas, como Madrid, y que ha ido ampliándose hacia las menos habitadas, como Teruel.

La primera Usecic se puso en marcha en 2002 en Murcia con carácter de experiencia piloto para evaluar su eficacia en la persecución y prevención de la delincuencia. Tras constatar que este equipo –que desplegó su labor por toda la Comunidad– resultaba eficaz, se procedió a su extensión a otras provincias.

La Usecic, que llega a Teruel año y medio después de su creación, está dotada con personal de la propia Comandancia que cambia de destino pero también con agentes de otras provincias que optaron a la convocatoria para construir el equipo. Desde la Guardia Civil no quisieron precisar el número de integrantes del nuevo equipo, que podría rondar la media docena.

Aunque su base de operaciones está en la Comandancia de la Guardia Civil, su campo de actuación se extiende por toda la provincia. La primera intervención de este grupo, que también participa en los dispositivos policiales ante eventos con gran afluencia de público, tuvo lugar con motivo de las fiestas de Semana Santa. El pasado domingo, intervino en el operativo organizado a raíz de la celebración del quinto aniversario del aeropuerto de Teruel, un acto que registró una afluencia multitudinaria de visitantes.

Los guardias asignados al nuevo servicio reciben formación específica. Además de su función especializada en la prevención de la delincuencia, pueden realizar labores de apoyo a otras unidades, labores de escolta de delincuentes peligrosos o de protección de personalidades. La plantilla puede actuar en bloque o disgregada.

El nuevo equipo se implantó en la provincia el pasado mes de marzo, tres meses después del triple crimen de Andorra que desató una oleada de protestas y quejas vecinales por la insuficiente plantilla de la provincia, con 620 agentes para 30 cuarteles. La Comandancia niega que la implantación de la Usecic sea una respuesta al malestar vecinal por la escasez de personal.