La mitad de los siete kilómetros del antiguo tren minero que conectaba la mina de carbón del pozo de Santa Bárbara de Utrillas con los lavaderos donde el mineral se cargaba rumbo a Zaragoza volverán a funcionar, aunque esta vez para uso recreativo. La línea se cerró definitivamente en 1966, cuando se sustituyó el transporte ferroviario por camiones. El recorrido turístico, en el que se han invertido 270.000 euros, se estrenará el próximo 4 de diciembre, fiesta de la patrona de los mineros, Santa Bárbara.

El tren minero volverá a conectar la explotación de Minas y Ferrocarriles de Utrillas (MFU), situada a las afueras del casco urbano, con el antiguo hospital, ahora reconvertido en el Museo de la Ciencia y la Arqueología Minera. La recuperación de 3.500 metros del antiguo tendido ferroviario ha seguido las técnicas del ferrocarril original. Las obras han sido ejecutadas por la empresa Riarco, que ha instalado 1.500 traviesas. La constructora recurrió al asesoramiento de antiguos ferroviarios para reponer la vía con la máxima fidelidad al inicial.

El alcalde, Joaquín Moreno, explicó que la reapertura del histórico tren ha despertado "mucha expectación" en la localidad, que se reencontrará con uno de los elementos más representativos de su pasado esplendor minero, el ferrocarril. La mina Santa Bárbara, abierta en 1903, marcó el despegue de la cuenca central, que echó el cerrojo a principios de los años noventa del siglo XX.

Los viajes, que se enmarcan en el aprovechamiento turístico del extenso patrimonio minero de Utrillas, se reanudarán con la locomotora Hulla, una de las que circularon en su día por este mismo trazado cargadas de carbón. También podría incorporarse a la línea la máquina Palomar, que trabajó para MFU y acaba de ser sometida a un laborioso proceso de restauración pero que tiene pendiente la reparación de la caldera.

La locomotora Palomar, con un ancho de vía de 60 centímetros, fue fabricada en Alemania durante la I Guerra Mundial para la línea que unía el país con Turquía. Fue adquirida por MFU en 1921 tras haber funcionado durante varios años en Marruecos. Recorrió la línea minera hasta su clausura.

Joaquín Moreno resaltó que el tren minero volverá a dar servicio de acuerdo al diseño fijado en los planos que MFU utilizó para poner en marcha la línea en 1904. Añadió que, en las obras, se han usado también algunos aparatos de principios de siglo XX. Moreno resaltó que la ejecución de los trabajos se ha llevado a cabo en tiempo "récord" para cumplir con los estrictos plazos marcados por el Fondo de Inversiones de Teruel, que financió las obras