El Miner subvencionará 18 proyectos empresariales que crearán 159 puestos de trabajo

Malestar en la cuenca minera porque la mayoría corresponde a pueblos sin minas y de fuera de la provincia.

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A. G./Bykofoto

El Plan Miner, una iniciativa creada por el Gobierno central para minimizar el impacto negativo en los municipios tras la reconversión del carbón, subvencionará 18 proyectos empresariales que comportarán una inversión de 58,4 millones de euros y generarán 159 puestos de trabajo.

La Mesa de la Minería, un órgano integrado por representantes de la DGA, la Diputación Provincial, sindicatos y organizaciones empresariales, ha seleccionado estas actividades empresariales que deberán ser aprobadas definitivamente por el Ministerio de Energía y Turismo. Será también esta institución la que decidirá los porcentajes de subvención con cargo al Plan Miner, correspondiente a la convocatoria de 2016.

Los proyectos ya fueron seleccionados en una primera evaluación por el Ministerio de entre un total de 27 presentados a la convocatoria. De ellos, 7 se incluirán en la línea de grandes proyectos, con inversiones a efectuar que oscilan entre los 700.000 euros y 45 millones de euros. Estos requieren, asimismo, la creación como mínimo de tres puestos de trabajo durante tres años. El resto de las iniciativas empresariales se engloban en el apartado de pequeñas actuaciones, cuyas inversiones se sitúan entre los 48.000 euros y los 480.000. Estos últimos deben generar al menos un puesto de trabajo.

Las actuaciones van destinadas a cinco municipios, de los cuales solo uno Mequinenza, ha explotado minas de carbón. De la provincia de Teruel se han seleccionado proyectos que se van a instalar en Alcañiz y Muniesa; y los otros tienen como sede Fraga y Torrente de Cinca.

Precisamente, la subvención de iniciativas empresariales que no se van a ubicar en municipios mineros ha generado malestar en la cuenca minera turolense, en donde se considera que se deberían cambiar los criterios de selección con el fin de concentrar los beneficios en los municipios afectados directamente por las explotaciones carboníferas.

"Sabemos que la Mesa de la Minería ha cumplido con la legalidad –explicaba el alcalde de Ariño, Joaquín Noé–, pero creemos que deberían priorizarse solo los pueblos que han tenido en su territorio minas, porque son los que realmente han sufrido los efectos de la reconversión". Los alcaldes de la comarca minera turolense consideran que municipios como Fraga son "privilegiados", con buenas comunicaciones y "una población que no sufre una severa regresión demográfica como en Teruel", agregó Noé.

Reconoció, no obstante, que en el listado de proyectos para acceder al Miner faltaban emprendedores de la zona, ya que, a su juicio, los empresarios se muestran reacios a promover iniciativas en esta zona, muy castigada por el cierre de las minas. "En un pueblo como Andorra, por debajo de los 8.000 habitantes, y con tendencia a la baja, la gente se piensa mucho la posibilidad de emprender cualquier inversión", apuntaba Joaquín Noé. Pese a ello, mostró su confianza en el grupo de trabajo constituido con representantes del Gobierno de Aragón para promover la reindustrialización de la zona.

La mayoría de los proyectos seleccionados por el Miner pertenecen al ámbito agroalimentario, pero los hay del sector servicios.

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