La falta de financiación bloquea la vía verde de Utrillas

El proyecto para acondicionar como vía verde dos antiguos trazados ferroviarios ­–el construido a principios del siglo pasado para conectar Teruel con Alcañiz y la línea minera de Utrillas a Zaragoza– permanece bloqueado desde hace casi dos años por falta de financiación. Las comarcas implicadas en esta iniciativa: la Comunidad de Teruel, Cuencas Mineras y el Campo de Belchite, así como el Ayuntamiento de Zaragoza, van a retomar las negociaciones con el Gobierno central a principios del próximo año para tratar de conseguir fondos que permitan sacar adelante la actuación, presupuestada en 4 millones de euros.

El deseo de las comarcas Comunidad de Teruel y Cuencas Mineras de que el Fondo de Inversiones de Teruel (Fite) de 2016 asumiera obras básicas para rescatar tramos perdidos de la vía, bien por la invasión de la carretera nacional o por campos de cultivo, quedó truncado. El Fite excluyó la ayuda solicitada de 200.000 euros del listado de actuaciones a desarrollar en esta anualidad. A pesar de ello, se pretende presentar nuevamente una solicitud para el Fondo correspondiente a 2017, según señaló el vicepresidente de la Comarca Comunidad de Teruel y alcalde de Alfambra, Francisco Abril.

Paralelamente, según destacó el presidente de la Comarca Cuencas Mineras, José María Merino, se intentará negociar el apoyo económico por parte de la Administración central, ya que el proyecto se enmarca dentro del programa de caminos naturales impulsado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

Merino declaró que a principios de año se retomarán las negociaciones "solicitando una reunión con los responsables de la Dirección General de Desarrollo Rural".Trámites pendientes

Aunque las dos fases del proyecto, la que contempla la plataforma que discurre entre Zaragoza y Utrillas a través del Campo de Belchite; y la de Utrillas a Teruel, ya han obtenido la aprobación definitiva por parte del Instituto Aragonés de Gestión Ambiental –uno de los trámites más complejos–, falta todavía mucho camino administrativo que recorrer. José María Merino explicó que están pendientes los permisos de la Confederación Hidrográfica del Júcar porque el camino atraviesa algunos puntos del río Alfambra; así como la cesión de la línea ferroviaria en desuso por parte del Adif. Esta última cuestión se plantea complicada debido a la negativa de la compañía a transferir el antiguo trazado de forma gratuita y a imponer unos costes de alquiler que los alcaldes consideran "excesivos".

Merino dijo, no obstante, que la idea es no iniciar estos trámites en tanto en cuanto no se disponga de la financiación para comenzar el proyecto.

Francisco Abril subrayó el hecho de que desde la Dirección General de Desarrollo Rural existe un compromiso de acometer esta actuación, aunque sea por fases, de manera que no resulte tan gravoso para la Administración.

Como alcalde de Alfambra ­–una de las localidades que se podrían beneficiar con la vía verde– consideró este trazado "muy importante para el desarrollo de la zona y con grandes potencialidades turísticas". "Se trata además –continuó– de un recorrido cómodo y accesible y con mucho atractivo, parte del cual coincide con la senda fluvial del Alfambra". El camino natural contaría con 200 kilómetros de longitud y atravesaría 28 términos municipales.