Renfe utilizó los criticados automotores 596, popularmente conocidos como Tamagotchi, en la línea Zaragoza-Teruel cuatro días consecutivos, el último de ellos ayer. El primero de los trenes –cuestionados por su menor confort y su propensión a las averías– llegó a la estación turolense procedente de Zaragoza la noche del viernes, y la situación se repitió con el mismo horario el sábado y el domingo. Estos vehículos fueron utilizados los días siguientes, con el primer servicio de la jornada para hacer el trayecto inverso, Teruel-Zaragoza.

La principal incidencia derivada del uso continuado de los automotores 596 se produjo ayer por la mañana, cuando una avería mecánica provocó un retraso de 25 minutos en la llegada del primer tren de la mañana desde Teruel a la capital aragonesa. La demora repercutió también en un servicio Zaragoza-Teruel-Valencia, que tuvo que esperar el paso en sentido contrario del Tamagotchi en la estación de María de Huerva ?(Zaragoza) –al ser de vía única, los cruces de la línea solo se pueden hacer en determinadas estaciones– y que, en Teruel, acumulaba 30 minutos de tardanza sobre el horario previsto.

Desde la Plataforma en Defensa del Ferrocarril –que aglutina a agentes sociales e instituciones– reiteraron su oposición al uso de los automotores 596 porque ofrecen menos prestaciones que los trenes habituales de la línea Teruel-Zaragoza y padecen averías con demasiada frecuencia, la última de ellas ayer mismo. Se trata de vehículos que no pueden circular a más 120 kilómetros por hora frente a los 160 que permite como máximo el tendido ferroviario Teruel-Zaragoza y tiene problemas de climatización, entre otros inconvenientes. Se fabricaron en los años 80 del siglo pasado y fueron reformados en la década siguiente.

El portavoz de la Plataforma, Pablo Justo, calificó la insistencia de Renfe en usar el automotor 596 –los pasados 12 y 13 de septiembre también se emplearon– de "falta de respeto a los viajeros". Justo definió estos trenes como "chatarra con ruedas" y los consideró inadmisibles "tanto en la línea de Teruel como en cualquier otra".

Renfe argumentó que la compañía dispone de un "parque de trenes" para atender los servicios de Aragón en función de la demanda. Un portavoz de la empresa ferroviaria afirmó que "no pasa nada" por utilizar en la línea Zaragoza-Teruel los polémicos automotores porque "son cómodos y cubren las necesidades del servicio". La misma fuente confirmó la avería que ayer demoró casi media hora la llegada a Zaragoza del tren que salió de la estación de Teruel a las 6.30. Al pasar por Cella, a 17 kilómetros del punto de partida, ya acumulaba una tardanza de 10 minutos. El tren llegó a la capital aragonesa con ocho pasajeros.

La Dirección General de Movilidad del Gobierno aragonés recordó que "la queja por la calidad del material que se emplea se ha trasladado en repetidas ocasiones a Renfe y al Ministerio de Fomento", aparentemente sin resultado.