La DGA quiere implicar a Endesa y al Ministerio en un foro para aclarar el futuro del carbón
La primera reunión será en un mes y Gastón también pedirá hablar con la eléctrica para saber si invertirá en la térmica.
Las comarcas mineras de Teruel lanzaron ayer un nuevo SOS al Gobierno de Aragón, que respondió con una propuesta para crear un grupo de trabajo en el que se pretende que estén presentes, además de la mesa por el futuro de la comarca de Andorra, el Gobierno central, la Diputación Provincial y las empresas implicadas, incluida Endesa. La eléctrica lleva meses haciendo oídos sordos a las insistentes peticiones de los afectados para que concrete sus planes de futuro en la térmica de Andorra, por lo que el Departamento de Industria asumirá esa reclamación y pedirá de manera "inmediata" una reunión con la presidencia de la compañía, propiedad de la italiana Enel.
Así lo acordaron ayer la consejera Marta Gastón y los representantes de la mesa que aglutina a los agentes sociales. Ambas partes compartieron la preocupación por la falta de noticias de Endesa, por lo que exigen "que se pronuncie de una vez".
El delegado de CC.OO. en la central, Antonio Planas, recordó que hace tres semanas anunció que invertirá 218 millones en la central coruñesa de As Pontes para mejorar su eficiencia ambiental. Si no hace lo propio en Andorra para adaptarla a la nueva normativa europea antes de 2020, su actividad será inviable. De hecho, ya empieza a serlo para las minas del entorno que la abastecen, puesto que Endesa lleva tres meses sin comprar carbón turolense, denunció Planas. Ello ha provocado 110 despidos en lo que va de año en el complejo minero-eléctrico, "y allí no hay otra cosa", advirtió. Temen que si la situación persiste, 2016 termine con la pérdida de unos 200 puestos. En enero, había 400 trabajadores.
Ante el estallido de esta crisis, la DGA y los representantes de la mesa urgen avanzar en los planes de reindustrialización para generar empleo en los municipios directamente afectados. Este año llegarán dos millones del Fondo de Inversiones de Teruel y otros dos complementarios cuyo destino está sin decidir y para los que se quieren plantear ideas en el seno del grupo de trabajo. A este respecto, Gastón reclamó al Gobierno central que garantice la continuidad del FITE y que "replantee" las condiciones para usar esos fondos, ampliando el plazo de ejecución de las actuaciones.
Por su parte, Planas criticó la paralización por parte del Gobierno central del proyecto de elevación del agua del Ebro a Andorra o el "incumplimiento" del plan del Carbón 2013-2018. También el alcalde de Ariño, Joaquín Noé, lamentó que el hecho de que haya un Gobierno en funciones "está perjudicando mucho". Pero a la falta de concreción de ayudas económicas se suma que "no surgen proyectos porque la zona está en declive", reconoció.
De todo ello esperan hablar en el grupo de trabajo que Gastón quiere constituir la última semana de septiembre para, "de forma conjunta, estudiar y planificar el futuro de estas comarcas". "Hay que diversificar y buscar alternativas", insistió, al tiempo que se mostró optimista sobre la asistencia de Endesa y del Ministerio."Receptividad" en las empresas
"La mesa nos ha dicho que en alguna conversación habían visto receptividad en la compañía por formar parte del grupo. Nosotros hemos hablado con las empresas mineras y también las hemos visto receptivas", destacó. "En el caso del Gobierno central, creemos que debe estar", zanjó Gastón.
En todo caso, la DGA y los representantes de la zona minera volvieron a escenificar ayer su "frente común" por el futuro de este territorio.
