Estampas modernistas para reclamar el desbloqueo del proyecto del Conservatorio

Los vecinos de San Julián salen a la calle de nuevo para protestar por el retraso en la restauración del antiguo asilo.

Los vecinos representaron escenografías modernistas, de la misma época en la que se construyó el asilo de San José.
Los vecinos representaron escenografías modernistas, de la misma época en la que se construyó el asilo de San José.
Jorge Escudero

Con la escenificación de una estampa de la vida callejera de principios del siglo XX y con el personaje de Dolores Romero como protagonista principal, salieron ayer a la calle de nuevo los vecinos de San Julián de Teruel para protestar por el bloqueo que sufre la reforma del antiguo asilo de ancianos. La escena modernista –de la misma época que el edificio– tuvo lugar en la plaza del Torico, sorprendiendo a los turistas que, a pesar de la hora temprana –poco antes de las once de la mañana–, paseaban por el centro neurálgico de la capital. Muchos, incluso, se animaron a hacer fotos de los personajes vestidos de época, que repartían folletos y mostraban paneles denunciando la situación de "abandono y desidia" que, según repetían, padece el asilo. El presidente de la Asociación de Vecinos, Pepe Polo, advertía de que al inmueble "le quedan días". "Está tan mal que con una tormenta o un simple petardo fallero, se podría venir abajo", manifestó.


Los vecinos no podía ocultar ayer una nueva preocupación que se suma a su latente estado de inquietud, al no haberse formalizado el jueves la firma entre la consejera de Cultura y la alcaldesa de Teruel del protocolo que iba a definir un calendario de actuaciones de cara a la recuperación del asilo y su transformación en conservatorio de música y centro cultural. "Es una mala noticia", reconocía Polo. "Entendemos que se puede deber a un problema de agenda, pero es un hecho que no ha habido reunión, y esperamos que no tenga consecuencias", añadió el dirigente vecinal.


La de ayer fue una acción de protesta "lúdica y divertida", como señalaban los vecinos. En sintonía con la que se pretende llevar a cabo el día 30 de septiembre y para la cual han solicitado ayuda a las asociaciones culturales y colectivos sociales de Teruel a través de un concurso de ideas. El día 30 del próximo mes es la fecha máxima que han propuesto los vecinos "para desatascar el proyecto", explicó Pepe Polo. La decisión del Gobierno de Aragón y del Ayuntamiento turolense de modificar el proyecto para incluir medidas sismorresistentes ha sido el último motivo para retrasar la obra.Cronología de un desastre


Con objeto de hacer partícipes a los viandantes del problema, se repartieron folletos con la descripción gráfica de la "cronología de un despropósito". En la hojas, repartidas como si de una mañana veraniega de los felices años veinte se tratase, se describían con numerosas fotografías todos los contratiempos que ha sufrido el proyecto desde que se gestó hace 24 años.


Los vecinos empapelaron posteriormente las columnas de la plaza del Torico con grandes carteles alusivos al estado de ruina que presenta el asilo, un edificio que forma parte del patrimonio modernista de la ciudad. Una batería de fotografías de diferentes estancias aludían a su ruina inminente. "Las imágenes reflejan claramente –explicaba el presidente de la Asociación de Vecinos­– su aspecto de deterioro".


En su trayectoria de lucha pertinaz porque se recupere una emblemática obra arquitectónica y se le proporcione un uso práctico, la Asociación ha tenido peores y mejores momentos, pero uno de los más temidos es el próximo día 15 de septiembre, cuando la Administración se comprometió a tener listo el proyecto para hacer el edificio resistente a los terremotos. "El equipo redactor tendría que tener terminado el modificado para incorporar los elementos sismorresistentes a los cimientos", indicaba Polo. "Sería muy preocupante que el documento no estuviera en la mesa de los técnicos municipales y del Gobierno de Aragón para su aprobación el día 15", agregó.


El presidente de los vecinos cree que si no se cumplen esos compromisos, se podrían perder 1,5 millones de euros del Fondo de Inversiones de Teruel, Fite, de 2016, además de dar ya por extraviadas las partidas correspondientes a los fondos de 2014 y 2015.


En San Julián los ánimos no decaen y ayer mostraron su intención de retomar las movilizaciones en septiembre con más fuerza si cabe. Han mantenido contactos con grupos de teatro y músicos para diseñar acciones de protesta "imaginativas".

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión