El juez de Calamocha podría sentar en el banquillo a Francis Franco
El nieto de Franco está imputado después de que un todoterreno de su empresa embistiera a un coche de la Guardia Civil.
El juez de Calamocha podría sentar en el banquillo de los acusados a Francis Franco Martínez-Bordiú. El nieto del dictador está imputado a raíz del suceso ocurrido la madrugada del 30 de abril de 2012 en una pista forestal de la pedanía de Collados, cuando un vehículo todoterreno propiedad de una empresa de los Franco embistió a un coche patrulla de la Guardia Civil. El incidente se saldó con un agente herido y daños materiales.
Francis Franco declaró inicialmente ante el juez que un exempleado suyo era quien conducía el todoterreno aquella noche y la misma tesis apoyó otro de sus antiguos trabajadores y familiar del anterior, Silviu Rosca. Sin embargo, el exempleado negó ser el autor de los hechos al afirmar ante el juez que rompió su vínculo laboral con los Franco en 2009 y que cuando sucedieron los hechos, él estaba en Rumanía, su país de origen.
Este lunes, Silviu Rosca, citado de nuevo ante el juez, rectificó su versión y confirmó que su pariente estaba en Rumanía cuando se produjo el suceso. No aportó nada más a la investigación, pues se acogió a su derecho a no declarar. Aquí no se está diciendo la verdad, declaró a los medios de comunicación el abogado defensor del guardia civil herido, Carlos Muñoz, al término de la declaración de Silviu Rosca.
Tras casi 4 años de investigación, todo parece indicar que la instrucción judicial ha llegado a su fin. Ahora, el magistrado de Calamocha puede sobreseer provisionalmente el caso -algo poco probable, pues ya podría haber adoptado esta medida con anterioridad- o abrir juicio oral contra los imputados para que sea el Juzgado de lo Penal quien depure posibles responsabilidades.
