El laboratorio especializado en análisis de productos cárnicos, que se abrirá este mismo año en Calamocha, permitirá que la agroalimentación siga siendo un sector puntero en esa zona de la cuenca del Jiloca. Es lo que espera el Ayuntamiento de la localidad, que construyó este centro en la anterior legislatura, hace unos cuatro años, pero nunca se llegó a abrir.

La gestión de las instalaciones se adjudicó el pasado mes de diciembre a la empresa Nilsson, que llevará a cabo su explotación por un periodo de 20 años con un canon anual de 10.000 euros. El Ayuntamiento pretende destinar este importe al mantenimiento del propio laboratorio.

Su apertura, no obstante, se retrasará unos meses, ya que, según dijo el alcalde, Manuel Rando, alguna de las máquinas que integran su equipamiento se encuentran averiadas por haber estado inutilizadas tanto tiempo. El centro deberá ser objeto de una revisión para su puesta a punto y subsanar las deficiencias, entre ellas el sistema de calefacción.

"El material –señaló– se encontraba metido en cajas, por lo que a la hora de poner en marcha algunos de los aparatos, estos no han funcionado". Agregó que al estar el equipamiento dentro del periodo de garantía, el Ayuntamiento no tendrá que hacer frente a los costes. El material supuso una inversión de 150.000 euros.

Además de los productos cárnicos, el laboratorio se encargará de las analíticas del agua de boca de Calamocha y de sus barrios, lo que supondrá un ahorro de unos 4.000 euros. El centro generará en principio dos puestos de trabajo, pero Rando señaló que la empresa tiene previsto con el tiempo ampliar la plantilla a dos personas más. Para el alcalde, son prioritarios los proyectos que generan empleo, y agregó que cualquier puesto de trabajo creado, "por poco que sea, es muy bien recibido en una zona tan castigada por el desempleo como esta".

Pero el laboratorio contribuirá también a consolidar el sector agroalimentario como un pilar decisivo en la economía de la localidad y de la comarca. "Es importante porque complementa a las industrias cárnicas ya asentadas en Calamocha y a las que puedan venir, ademas de mejorar su competitividad", puntualizó Rando.

Museo del Jamón

El laboratorio ocupa un espacio en el edificio del Museo del Jamón, otra de las iniciativas, según Rando, "inacabadas en la anterior legislatura". Este año, sin embargo, se pretende dar un fuerte impulso a este proyecto, que ya cuenta con 110.000 euros consignados por el Fondo de Inversiones de Teruel, FITE, de 2015 para su equipamiento.

El alcalde pretende abrir las instalaciones culturales este mismo año. La idea es terminar su dotación en junio, para posteriormente sacar a concurso su gestión. El Centro de Estudios del Jiloca se ha encargado de elaborar un proyecto sobre los contenidos del Museo, una actuación que también se pretende adjudicar en breve.