"Endesa sigue enrocada. Dicen que el plan de optimización previsto se aplica para hacer más atractiva la inversión, pero que es Enel Italia quien tiene que tomar la decisión definitiva que garantice el futuro de la actividad minera". Así resumieron ayer los representantes de los trabajadores de las centrales térmicas la primera reunión que mantuvieron con la empresa para negociar el plan de optimización que la eléctrica presentó en diciembre.

El plan prevé recortes de personal en todas las térmicas que tiene la eléctrica en el país así como la externalización de algunos servicios. En concreto, en Andorra la plantilla se verá reducida en un 24% a través de 42 prejubilaciones, puestos de trabajo que, a priori, no se restituirán. También contempla la externalización de algunos servicios dentro del parque de carbones.

Los sindicatos planteaban aceptarlo a cambio de que Endesa se comprometiera a realizar las inversiones que necesitan las infraestructuras para adaptarse a la nueva normativa europea de emisiones contaminantes, 230 millones de euros en el caso de la andorrana. Sin embargo, la eléctrica no movió ni un ápice su postura. "También se pidió que si se hacen las inversiones se lleve a cabo un cambio generacional en la plantilla", añadió el presidente del Comité de Empresa de la Central Térmica de Andorra, Hilario Mombiela. Asimismo, los trabajadores exigieron a la eléctrica un organigrama de cómo quedarán los servicios en las centrales afectadas.

Al no avanzar en ninguno de los aspectos, trabajadores y empresa se han vuelto a citar el próximo 25 de enero en Madrid. Desde Endesa prefirieron no hacer declaraciones con respecto a lo tratado en el encuentro, que duró más de dos horas y en el que estuvieron presentes Alejandro Mantecón (UGT-Aragón) y Antonio Planas (CC. OO.-Aragón).

El plan de viabilidad, además de recoger recortes de personal en todas las térmicas y plantear externalizaciones, incluye trabajar en mejorar los costes de la compra de carbón. En ese sentido, la eléctrica negociará con las empresas mineras los contratos para la adquisición de lignito autóctono.

Con repecto a los empleos, Andorra, que cuenta con una plantilla directa de 178 empleados, es la infraestructura que más puestos de trabajo pierde. Le sigue la térmica de Alcudia, con la amortización de 32 empleos, la de Compostilla (22), la de As Pontes (19) y la de Almería.Plan de Reindustrialización

Por otra parte, hoy la consejera de Economía e Industria del Gobierno de Aragón, Marta Gastón, recibe en Zaragoza a las 13.00 a los miembros del Comité de Empresa de la Central Térmica de Andorra. El presidente, Hilario Mombiela, reconoció anoche que esperaba trasladarle alguna novedad tras la reunión de ayer pero que al no avanzar, seguirán reclamando apoyos para presionar a Endesa. "Gobierno de Aragón, agentes sociales, empresariales y políticos. Todos tenemos que ir de la mano para presionar y que se hagan las inversiones", dijo.

Los trabajadores andorranos también propondrán la creación de una mesa de trabajo para la reindustrialización de la zona que comience a trabajar con "inmediatez". Pedirán que en ese foro se sienten el Gobierno de Aragón, los sindicatos, los alcaldes y las empresas mineras, concretamente Endesa, Samca y Compañía General Minera. "No nos podemos dormir. Si nos cierran la Central nos encontraremos en una zona donde no existe nada que pueda sustituir el tejido industrial que sustenta la Térmica", concretó.