El aeropuerto contará con un segundo hangar para una escuela de pilotos y nuevos clientes
Las obras, que se ejecutarán en 2016, costarán 784.597 euros y durarán seis meses. El consejero José Luis Soro valora muy positivamente la evolución de la actividad.
El consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, manifestó tras presidir el Consejo Rector que la trayectoria del aeropuerto es "muy positiva" y destacó su "proyección" de futuro, con posibilidades de incrementar la actividad económica y el empleo generado. Explicó que en fechas próximas empezarán los trabajos de pavimentación de la ampliación de la campa de estacionamiento con una inversión de 1,3 millones de euros. Sumada al parquin actual, habilitará espacio con capacidad para 80 aviones de gran tamaño.
La campa actual está saturada y, debido a la demanda de estacionamiento de aeronaves que registra Tarmac, el aeropuerto ha tenido que acondicionar una zona de aparcamiento provisional sobre tierra. La reciente llegada de varias remesas de aviones Boeing 747 de gran envergadura de la compañía rusa Transaero, en quiebra, saturó el espacio disponible. El aeropuerto todavía dispone de suelo libre para futuras ampliaciones hasta una capacidad total de 220 aviones en 120 hectáreas de superficie.
Soro anunció la licitación del nuevo hangar, que estará terminado a finales de 2016 y que tendrá como principal destinataria a la escuela de pilotos británica Flying Time Aviation (FTA), que empezará a operar en el aeropuerto a mediados del año que viene para ofrecer a los alumnos las clases prácticas de vuelo.
El coste del hangar, que se construirá junto al ya existente, se asumirá con fondos del Consorcio, que recabará también apoyo del Fondo de Inversiones de Teruel (FITE), una herramienta financiera que, según el consejero, encaja con proyectos "estratégicos" como el aeropuerto. El nuevo hangar complementa al ya existente, explotado por Tarmac dentro de su negocio de mantenimiento de aviones y que tiene dimensiones 80 por 75 metros que duplican a las del pabellón proyectado.
El director del complejo aeronáutico, Alejandro Ibrahim, explicó que la escuela de pilotos FTA precisará también de 100 metros cuadrados del edificio administrativo y de servicios del aeropuerto para oficinas. Ibrahim apuntó, entre los usuarios que se podrían sumar a FTA para rentabilizar el nuevo hangar, a empresas dedicadas a la aviación ejecutiva o al rodaje de anuncios publicitarios, una actividad pujante en el aeropuerto.
El alcalde de Teruel, Manuel Blasco, también integrante del Consejo Rector, afirmó que el aeropuerto funciona "a plena satisfacción" y da muchas "alegrías" a la ciudad con el negocio que genera. Blasco atribuyó buena parte del éxito del proyecto a la política seguida en materia de inversión pública, supeditada siempre a la demanda de operadores privados dispuestos a rentabilizarla.
Manuel Blasco destacó también la eficiencia económica del Consorcio, que tiene "las cuentas saneadas" y puede embarcarse en ampliaciones de sus infraestructuras. El alcalde señaló que la llegada de FTA en 2016 ha generado expectativas de negocio en el sector hostelero porque los clientes de la escuela de pilotos de líneas aéreas son potenciales consumidores de alto poder adquisitivo.
Otra de las mejoras deequipamientos que se acometerán de inmediato es la conexión de fibra óptica para mejorar las telecomunicaciones. El enlace se realizará a la altura de Caudé con un tendido de 4.500 metros de cable. La inversión precisa asciende a 70.000 euros. Los responsables del aeropuerto no precisaron cuándo se abordará el desguace y reciclado de aviones, una de las líneas de negocio reservadas a Tarmac que todavía no ha arrancado.
