Un lustro sin la iglesia

Los vecinos de Montalbán no quieren seguir celebrando sus ceremonias religiosas en una pequeña capilla habilitada en la plaza desde hace 7 años para este fin. No pueden hacer uso de la monumental iglesia de Santiago porque se cerró al culto en 2008 para proceder a su restauración exterior y, tras concluir las obras, no volvió a abrir sus puertas por el mal estado que presentaban sus espacios interiores. Las pinturas murales góticas y mudéjares permanecen ocultas bajo capas de escayola, las humedades campan a sus anchas y el suelo se encuentra muy deteriorado, ofreciendo un aspecto desolador de este templo declarado BIC en los años treinta del siglo pasado.

Las continuas demandas del Ayuntamiento a los organismos competentes para recuperar esta iglesia, construida entre los siglos XIII y XIV y única en su tipología de carácter religioso-militar, han caído en saco roto, y tan solo en 2010 el proyecto ya redactado fue incluido en el programa del 1% destinado a patrimonio cultural por el Ministerio de Fomento. "La difícil situación económica del país paralizó este plan, y, como consecuencia, la restauración de la iglesia de Santiago volvió a quedar sin financiación", señaló el alcalde, Carlos García Boix.

El primer edil de Montalbán no comprende las razones que han motivado el retraso de la reparación del templo que, a su juicio, hace tiempo podía haberse acometido por fases. Y agregó que los problemas de otras edificaciones religiosas de menor interés patrimonial ya han sido subsanadas. "Todas las iglesias monumentales de Aragón ya han sido arregladas", explicaba García Boix.

El alcalde reconoce que el elevado coste de la reforma –1,9 millones de euros– es el principal obstáculo, si bien señaló que debido a esta circunstancia, la intervención necesaria se dividió en dos proyectos: uno, que comprende una actuación en la cúpula, y un segundo, que se centraría en la recuperación de las pinturas de los muros. Faltaría una tercera fase que, según Carlos García Boix, ni siquiera ha sido cuantificada.

El interés del municipio por que este monumento sea restaurado ha llevado al alcalde a buscar financiación en organismos ministeriales. Una delegación municipal mantuvo recientemente un encuentro con el subsecretario de Estado de Fomento, Mario Garcés, para hacerle llegar los dos proyectos y reclamar ayudas. Y hace unas pocas semanas, la consejera de Educación y Cultura del Gobierno de Aragón, Mayte Pérez, visitó la iglesia de Santiago.

García Boix espera que las iniciativas llevadas a cabo estos últimos meses fructifiquen a lo largo de esta legislatura en una solución. "Me gustaría que en estos cuatros años se pudiera iniciar, al menos, uno de los dos proyectos. Lo importante es arrancar", apuntaba.

En el departamento de Cultura del Gobierno de Aragón señalaron que, si bien la consejera considera prioritaria la restauración de la iglesia de Montalbán, no hay un compromiso firme para acometer las obras dado su elevado coste. Y agregaron que cualquier acción está sujeta a las disponibilidades presupuestarias de la DGA. Por otro lado, desde la Consejería explicaron que se está a la espera de elaborar el plan de actuaciones de cara a los presupuestos del próximo año, "siempre teniendo en cuenta su interés por proteger y salvaguardar el patrimonio aragonés".

Mientras se aclaran las prioridades de la DGA, los vecinos seguirán celebrando los oficios religiosos en la pequeña capilla. Sin embargo, el trabajo de un grupo de voluntarios, que han llevado a cabo trabajos de limpieza en la iglesia de Santiago, mejorando su desolado aspecto, ha permitido que el colosal edificio pueda abrirse durante acontecimientos especiales. "Ellos han quitado el polvo y han colocado bancos, porque hasta ahora no teníamos dónde celebrar el día del patrón", manifestó el alcalde.