En la expedición participaron una veintena de políticos y técnicos representantes del Gobierno Central y de la empresa constructora, Rover Alcisa. Subrayaron que a final de este año se habrán certificado 11 millones de euros de la obra cuando lo asignado en los Presupuestos Generales del Estado es 6,8 millones. En 2016 se prevé una cantidad de 13,2 millones por lo que la partida en 2017 debería aumentar hasta los 34 millones para que pueda concluirse.

Garcés manifestó que el dinero no debe ser motivo de "preocupación" en el territorio porque si las obras llevan el ritmo correcto, Fomento "pondrá la consignación suficiente" para atender la cobertura íntegra de la carretera para que esté lista en octubre de 2017. "A partir de esa fecha los 14 kilómetros estarán para uso y disfrute de todos los ciudadanos", afirmó. En la actual legislatura, Fomento ha destinado 2.951 millones a Aragón y la inversión asciende a 1.922. No obstante, Garcés reconoció que Teruel es la provincia que "necesitaba" una mayor inversión.

La remodelación, que cuenta con alrededor de un centenar de trabajadores, permitirá pasar de los 17,5 kilómetros actuales a los 13,4 que tendrá el tramo final entre Ráfales y el límite con Castellón. También se reducirá el tiempo. En un turismo y respetando los límites de velocidad, se completará el trazado en nueve minutos frente a los 16 que cuesta ahora. Además, la carretera será de una sola calzada con dos carriles de 3,5 metros y arcenes.

El Gobierno Central sacó pecho de que este año se van a reactivar los tres tramos de la N-232 pendientes de remodelar. Al trazado del Matarraña se suma la mejora del Port de Querol, en Morella (Castellón), con un presupuesto de 51,4 millones. Se prevé que en noviembre se licite el tramo entre el Barranco de la Bota, donde el viernes tuvo lugar un accidente, y la Masía de la Torreta (Castellón). Faltaría por acondicionar otra zona, los 5,3 kilómetros entre la Masía de la Torreta y Morella Sur, cuyo proyecto se encuentra en redacción y debe someterse a evaluación de impacto ambiental. Menos optimistas se mostraron con respecto a la A-68 desde el Burgo de Ebro hasta el Mediterráneo, para la que solo se contempla una asignación sin plurianuales de poco más de un millón de euros.