​El campus de Teruel acoge la exposición Amantes de Japón

Una selección de 20 pinturas conocidas como 'Kakejiku' se expondrán a partir del martes.

La Sala de Exposiciones del edificio de Bellas Artes de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas del campus universitario de Teruel acogerá desde este martes, a las 19.00 horas, la exposición 'Amantes de Japón'. Las obras proceden de varias colecciones aragonesas, entre las que destaca la colección 'Pájaro profeta', de José Antonio Giménez Mas.


Esta adaptación de la muestra 'Noh-Kabuki. Escenas del Japón' permanecerá en Teruel hasta el día 25. El comisario es el profesor David Almazán, quien ha reunido una selección de 20 pinturas conocidas como 'Kakejiku' y xilografías en color --'ukiyo-e'--, recorriendo el siglo XIX y los comienzos del XX. Tras la inauguración, dirigirá una visita guiada.


El profesor Fernando Beltrán impartirá una conferencia magistral sobre 'El arte de las espadas japonesas' el 17 de febrero en el campus turolense.


La exposición se enmarca en la celebración de las Bodas de Isabel y muestra trágicos amores del Sol Naciente, fusionando leyendas e historia característicos del teatro clásico nipón, especialmente de sus dos vertientes más importantes, el noh y el kabuki.


El noh es culto y aristocrático. Se remonta al siglo XIV y recurre al uso de máscaras y un rico vestuario en un decorado casi desnudo. Su estética es sobria, contenida y misteriosa y está relacionada con el Zen. La música, el canto y la danza son tan importantes como el propio drama, que se basa en antiguas leyendas japonesas repletas de tragedias desgarradoras o amores tortuosos.


Por otro lado, el teatro kabuki es el reflejo de los gustos de la burguesía urbana japonesa desde el siglo XVII. Sus actores suelen ser grandes estrellas del escenario, llevan vistosas vestimentas y un maquillaje elaborado. Es un espectáculo popular de estética barroca.


Tanto el noh como el kabuki siguen representando, en la actualidad, historias milenarias. Una característica de sus representaciones es que no hay actrices sobre el escenario, así que son actores los que se ocultan con una máscara o se maquillan para representar a las heroínas de los apasionados dramas, las cuales suelen terminar sumidas en la locura o abocadas al suicidio.