La revisión del Plan General deberá retroceder a la casilla de salida

El trabajo será dirigido por los servicios municipales con contrataciones para desarrollar aspectos concretos

La revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Teruel, paralizada desde 2011, volverá a la casilla de salida después de trece años de trámites, dos encargos fallidos y 428.000 euros gastados. Todos los grupos municipales coincidieron en la reunión monográfica de la Comisión de Urbanismo celebrada el pasado jueves en que la mejor solución para salir del atasco pasa por encomendar la dirección técnica del proceso a los servicios municipales con la contratación de tareas puntuales a empresas.


La solución de volver a sacar a concurso el trabajo no fue respaldada por ningún grupo. El fracaso de los dos contratos con consultoras para revisar el PGOU inclina a todos los partidos –PP, PSOE, CHA, IU y PAR– a dejar la dirección del proceso en manos de los servicios municipales.


El concejal de Urbanismo, el popular Jesús Fuertes, señaló que el proceso de renovación del planeamiento de la ciudad deberá reanudarse desde el primer paso, con la presentación de un avance, para seguir con la aprobación inicial, la apertura de un plazo de alegaciones y su resolución antes del visto bueno final. El proceso se detuvo hace tres años cuando estaba pendiente la respuesta a la avalancha de alegaciones recibida al documento aprobado inicialmente, elaborado por la empresa Idom.


Fuertes explicó que, desde que en 2009 se aprobó inicialmente la revisión del PGOU redactada por Idom, la normativa urbanística ha cambiado drásticamente al igual que las circunstancias del sector inmobiliario. El concejal reconoció que muy poco trabajo de Idom será aprovechable para el nuevo intento –el tercero– de actualizar el planeamiento urbanístico. Indicó que solo trabajos preliminares como la cartografía, documentación gráfica, catálogos de edificios o mediciones sobre el terreno podrán reutilizarse. El edil afirmó que el documento que actualizará el PGOU, vigente desde 1985, será "nuevo" y arrancará su trámite desde la línea de salida.


Los grupos municipales también coincidieron en la necesidad de retomar los trabajos con la presente Corporación. El concejal de CHA, Paco Martín, aclaró que en cualquier caso las operaciones que se acometan antes de las elecciones locales de mayo de 2014 no condicionarán el modelo de ciudad, un aspecto que quedará en manos del próximo Ayuntamiento.


Jesús Fuertes explicó que los presupuestos municipales de 2015, en proceso de elaboración, incluirán partidas para trabajar en el PGOU. Entre las actuaciones que podrían abordarse sin esperar al nuevo Ayuntamiento figuran un catálogo de edificaciones ilegales que las localice y determine sus características, un estudio demográfico y una evaluación del impacto económico de la revisión.