Villel retira 10 metros cúbicos de lodo y piedras acumulados sobre sus calles por las tormentas

Repuesto el suministro de agua a un grupo de chalés que se quedaron sin servicio con la tromba del viernes

Los bomberos de la Diputación Provincial extrajeron agua y barro de una cochera que quedó anegada en Villel
Villel retira 10 metros cúbicos de lodo y piedras acumulados sobre sus calles por las tormentas
Antonio García/bykofoto

Vecinos de Villel equipados con maquinaria de obras públicas y de baldeo trabajaron ayer desde las 7 de la mañana en la limpieza de la capa de barro y piedras que cubría calles y plazas como consecuencia del desbordamiento de una rambla por la tormenta del pasado vienes, que dejó 92,6 litros de agua por metro cuadrado en una hora. Según una primera estimación, la riada acumuló diez metros cúbicos de lodo y grava sobre las calles, que en algunos puntos quedaron intransitables. Durante la jornada, se sumó a los trabajos el parque de maquinaria de la Diputación Provincial (DPT). Sus camiones y excavadoras acondicionaron el acceso al santuario de la Fuensanta, donde se ofició una misa presidida por el obispo de Teruel, Carlos Escribano


La avenida del barranco de Chartera, agravada por la dificultad de desagüe en el río Turia que también bajaba crecido, arrancó una tubería de la red de aguas y dejó sin suministro a un zona de chalés de las afueras de pueblo en la que viven 16 vecinos. El servicio se repuso a la 18.30 de ayer. 


La estampa de equipos de limpieza retirando el barro se repetía en Villaspesa, pedanía de Teruel. Los desprendimientos y arrastres de arcilla procedentes de la ladera contigua al casco urbano dificultaron la circulación por la travesía del pueblo, donde también trabajaron las máquinas de la DPT. 


Los bajos de cuatro viviendas particulares sufrieron inundaciones y los vecinos se esforzaban en limpiar el barro con mangueras y achicaban agua con bombas. La alcaldesa pedánea, Sonia Navarro, reclamó la limpieza de la rambla que pasa por la localidad para evitar desbordamientos como el registrado el viernes. Navarro agradeció el interés mostrado por el alcalde de Teruel, Manuel Blasco, que se desplazó el viernes y el sábado a la pedanía para conocer el alcance de los daños y afrontar su reparación.


La tromba de agua acompañada de granizo provocó daños de gravedad en la agricultura de Villaspesa, Villastar y Villel, además de dejar inservibles caminos y acequias. El alcalde de Villel, Juan José Rodero, explicó que las pistas "solo se pueden utilizar con todo terrenos". Rodero añadió que las máquinas de la DPT abordarán de inmediato la reparación de los caminos. Señaló, no obstante, que el principal problema derivado de la tormenta es la suciedad acumulada en calles, plazas y casas particulares. 


La lluvia y el pedrisco también causaron pequeñas inundaciones en varias viviendas de Villastar, donde el viernes cayeron 40 litros por metro cuadrado en una hora. "Los cultivos de la huerta están perdidos por completo", comentó un vecino. Las tormentas se repitieron ayer en distintos puntos del sur de la provincia. Entre las precipitaciones más copiosas, destacaron los 34 litros por metro cuadrado acumulados en Albarracín.