La historia de Teruel salta de los libros a los naipes

Tres jóvenes emprendedores han rebuscado en los libros para llevar hasta el presente la historia de convivencia entre las culturas cristiana, musulmana y judía en Teruel a través de un original juego de naipes.

El objetivo del juego, denominado 'Populi Turolii', explica una de sus creadoras, Isabel Cortel, es lograr un equilibrio entre los tres pueblos para que Teruel prospere y evolucione: "Tú ganas si tu cultura destaca pero sin imponerse, cumpliendo tus objetivos, pero si alguien llega a los diez puntos, todos los jugadores pierden".

Así, las cartas de objetivos dirigen la estrategia de cada jugador pero cumplirlos no implica que los demás caigan en desgracia, porque para que el juego continúe debe mantenerse cierto equilibrio.

El juego se compone de 96 naipes, y está pensado para entre tres y ocho jugadores en partidas que pueden durar unos quince o veinte minutos.

El creador del juego es Luis Valleaguado, y ha sido editado y distribuido por Marcos Valle, propietario de la tienda Zombies y Princesas de Teruel.

Todo comenzó hace dos años, aunque inicialmente se pensó para ambientarlo en otra ciudad.

Luis tuvo la idea mientras trabajaba en la serie de televisión 'Toledo', una serie de época que relata un tiempo en el que también vivían allí las tres culturas, recuerda Cortel.

Cuando la serie terminó, la idea quedó en el aire y al hablar con su hermano Marcos surgió la posibilidad de basarlo en Teruel. A partir de ahí surgió todo el proceso de argumentación del juego, la base histórica y la ilustración.

Los autores han buscado los personajes del juego en uno de los censos poblacionales de Teruel, así que son reales, del mismo modo que lo son los acontecimientos que se desarrollan durante la partida.

La estética de los naipes ha sido uno de los aspectos más cuidados, ya que las ilustraciones se han inspirado en la famosa techumbre mudéjar de la catedral turolense, de la mano de Guillermo Benito.

"Enseguida vimos que la estética de los dibujos de la catedral podía adaptarse al juego", pero el proceso de creación no fue fácil, especialmente en la fase de la elaboración de la estrategia.

"Hay que hacer muchos cálculos para cuadrar, y también pruebas con gente de distintas edades y jugones y no jugones para ver cómo responden", añade Cortel.

Esa ha sido la parte más difícil, junto a la selección de los eventos que protagonizan el juego, porque solo podían ser 24 y "tenían que afectar a las tres culturas de alguna manera, en mayor o menor medida".Eventos históricos

Entre ellos, la guerra de los Pedros de 1263, la creación de la morería y la judería en 1258 o las incursiones luteranas en la ciudad de 1566.

El juego abarca desde la creación del Fuero de Teruel en 1171 hasta su extinción en 1598 y aunque la historia real no es lo que determina la partida, sus responsables han buscado que el juego tenga rigor histórico.

Aunque "no es necesario conocer estos datos", uno de los atractivos es "aprender mientras se juega".

Ahora se muestran satisfechos con la acogida, ya que desde su presentación hace menos de un mes han vendido un centenar de ejemplares.

La tirada inicial es de un millar y los venden a un precio de 15 euros, y traducidos a cuatro idiomas porque está pensado también para que sea un buen recuerdo de la ciudad.