Más de 180 días de espera para hacerse un escáner en el hospital Obispo Polanco

El número de pacientes pendientes de acudir al Servicio de Radiodiagnóstico se ha duplicado en los últimos tres años.

Las demoras en el Servicio de Radiodiagnóstico del hospital Obispo Polanco de Teruel están creciendo y alcanzan, en algunos casos, récords históricos. El retraso más llamativo es el que afecta a las pruebas normales de escáner o TAC (Tomografía Axial Computerizada), que se sitúa actualmente en 186 días, algo más de 6 meses. Es decir, un paciente no urgente ni preferente que vaya hoy a pedir una fecha en la que someterse a un reconocimiento por escáner será citado para el próximo mes de octubre.


Algo menos, aunque también altas, son las demoras para ecografías –165 días–, o resonancias magnéticas –105 días–. Radiografías, con 3 días de espera, o mamografías de diagnóstico, con 7 días, son las pruebas más ágiles. Estos últimos datos son del pasado mes de febrero, pero, según ha sabido este periódico, las cifras de marzo y abril son similares.


Asimismo, el número de pacientes en lista de espera para ser sometido a alguna de las pruebas de radiodiagnóstico que se realizan en el hospital Obispo Polanco se ha multiplicado por dos en los últimos tres años. Mientras en febrero de 2011 había 1.520 personas pendientes de pasar por el Servicio de Radiología, en febrero de este año la cifra se elevaba a un total de 3.074. Casi la mitad de estos usuarios, 1.323, aguardaban para hacerse una ecografía; otros 722 habían solicitado una resonancia magnética; un total de 632 necesitaban someterse a un TAC o escáner y a otros 227 se les había prescrito la realización de una radiografía para concretar su diagnóstico.


Las listas de espera son más pequeñas en el apartado de endoscopias –pruebas para detectar patologías del aparato digestivo–, pero, aún así, en febrero había que aguardar en torno a 45 días para una colonoscopia normal y alrededor de 70 días para una gastroscopia no urgente ni preferente. En total, 160 pacientes esperaban para hacerse alguno de estos reconocimientos médicos, si bien en febrero de 2011 la cifra era todavía mayor, concretamente de 213.

«Es muy grave»

Para el sindicato médico CESM-Aragón, las demoras en radiología son «muy graves» habida cuenta de que se suman a los retrasos que también existen en el área de Consultas Externas y en Cirugía. «Al final, puede llegar a transcurrir un año, o incluso más, desde que un paciente expone al médico su dolencia hasta que el sistema sanitario pone remedio, un plazo demasiado largo que puede acarrear consecuencias fatales para el enfermo», indicó una fuente de dicha formación sindical. «Durante todo ese tiempo, el paciente puede que tenga que estar de baja laboral, acudir a Urgencias porque empeora su enfermedad o tomar medicamentos indefinidamente», agregaron.


La CESM atribuyó ayer el continuo aumento de los retrasos a la supresión de la actividad médica por las tardes mediante horas extras de los médicos. Criticó, además, que el consejero de Sanidad del Gobierno aragonés, Ricardo Oliván, «estime que la lista de espera no pone en riesgo la vida del paciente, cuando responsables de Sanidad de otras comunidades autónomas advierten, contrariamente, de que un enfermo se puede morir esperando su turno».


Mientras, sigue paralizada la compra por parte de la DGA de 5 aparatos radiológicos para hospitales aragoneses, entre los que figura un escáner de alta gama para el Obispo Polanco cuya puesta en funcionamiento contribuiría a agilizar el servicio. El modelo de TAC previsto para el hospital de la capital turolense es más rápido y ofrece imágenes más precisas que las del actual aparato, con más de 12 años de antigüedad. Fuentes médicas criticaron que «ni se hace el nuevo hospital ni se compran los aparatos prometidos; en Teruel no se hace nada».