La Guardia Civil ha detenido en Teruel a un hombre que presuntamente se aprovechaba de su trabajo como repartidor de una firma comercial para conocer el interior de diversos establecimientos hosteleros de la provincia en los que se produjeron 11 delitos de robo desde el mes de noviembre.

Según informa la Guardia Civil en un comunicado, los agentes procedieron el pasado día 21 de diciembre, y gracias a la colaboración ciudadana, a la detención de J.L.S. y a la imputación de N.LL.B., español y española de 31 y 33 años de edad respectivamente, como supuestos autores de los citados robos.

Estos delitos, que se habían producido en establecimientos hosteleros de las localidades turolenses de Argentes, Blancas, Libros, Ojos Negros, Pozuel del Campo, Riodeva y Villar de Salz, no son de un alto valor económico, ya que se componen desde un televisor de plasma de 42 pulgadas a una freidora o una cesta de Navidad, pero sí los daños para acceder a los locales.

Además, según han explicado las mismas fuentes, se trata de unos robos en pequeñas localidades que generaban una alarma social entre los vecinos por lo que con esta detención se permite reforzar la seguridad de estos pueblos.

El detenido, junto con los efectos recuperados, han sido puestos a disposición del Juzgado de primera Instancia e Instrucción número 1 de Teruel.