Cruz Roja Teruel ha repartido 26.150 kilos de alimentos entre 1.551 personas necesitadas de la provincia, desde que se pusiera en marcha la segunda fase del Plan de Ayuda Alimentaria a las Personas más Necesitadas, a principios del mes de octubre. 

Se trata de alimentos variados, de calidad, básicos, de fácil manipulación y conservación, que no necesitan refrigeración y que permiten realizar comidas completas, indica Cruz Roja en un comunicado. En concreto, se ha distribuido aceite de oliva, alubias, arroz, conservas de atún, galletas, garbanzos, zumos, tomate frito, judía verde, leche, macarrones, cereales infantiles, leche de continuación y potitos de pollo con verdura y frutas.

La distribución se ha efectuado a través de cuatro asambleas comarcales de Cruz Roja, las Comarcas de Cuencas Mineras y Sierra de Albarracín y la Mancomunidad de Municipios del Jiloca, que colaboran en la entrega individual de los alimentos y la atención a las personas, familias o grupos necesitados.

Esta distribución se hace mediante el reparto directo a las personas que acuden a sus locales, sedes de Cruz Roja, servicios sociales, o mediante el consumo de los productos en sus instalaciones donde se preparan los alimentos para ser consumidos, tanto en comedores como en casas de acogida.

La crisis económica que sufre nuestro país hace que cada día sean más las personas y familias que necesitan este tipo de ayuda porque su situación de extrema vulnerabilidad se va agravando con el paso del tiempo, lamenta Cruz Roja.

E informa de que el perfil de la persona que acude a la organización para solicitar ayuda está cambiando, ya que se están sumando personas que hasta hace poco tiempo tenían una situación económica normalizada pero que tras un periodo continuado de situación de desempleo y falta de ingresos económicos en la unidad familiar, se encuentran en situación crítica de necesidad.

Familias con todos sus miembros en paro, personas mayores pensionistas que se hacen cargo del sostenimiento de sus hijos y nietos, niños de familias empobrecidas o inmigrantes con los que la crisis económica se ha cebado especialmente son las nuevas realidades sociales a las que Cruz Roja debe dar respuesta.

Cruz Roja insiste en que seguirá distribuyendo alimentos a las personas de la provincia que necesiten esta ayuda durante lo que queda de año y todo el próximo.