Manuel Blasco: "Me conformaría con que Rajoy encargara los proyectos de obras pendientes"

El alcalde de Teruel, Manuel Blasco, dice que le pediría al futuro presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que encargara en su legislatura los proyectos de construcción de grandes infraestructuras para ejecutarlos cuando acabe la crisis.

Desde que se adopta una idea, como una autovía, hasta que se lleva a la práctica, pasan "diez o doce años", de los que, al menos, cuatro, se emplean en hacer los estudios de impacto medioambiental, las licitaciones y las adjudicaciones a los contratistas, dice.

Por eso, "me conformaría con que el Gobierno central, al principio de la legislatura, encargara el proyecto para que al final, con la salida de la crisis, tuviéramos los proyectos terminados", dice el alcalde y también senador del PP en una entrevista.

Alude en concreto a la autovía Teruel-Cuenca, de la que se habla mucho, pero que ni siquiera han comenzado los estudios sobre sus posibilidades, y "ya puestos a reclamar, ir a Madrid en el Ave".

Autovía

Los primeros estudios de la A-40 comenzaron ya hace 18 años, y entonces se trataba de conectar Maqueda con Cuenca pasando por Toledo y fue incluida en el Plan de Infraestructuras de 1993.

Algunos años después se añadieron los tramos Adanero-Ávila y Ávila-Maqueda al oeste, y Cuenca-Teruel al este; convirtiendo la A-40 en una alternativa a la congestionada A-2, al desviar el tráfico hacia la Autovía Mudéjar (A-23) a su llegada a Teruel.

Una vía fundamental

Para Blasco, la autovía Teruel-Cuenca es "fundamental" para la economía de las comunidades de Aragón, Cataluña, Castilla-La Mancha y Andalucía porque las conectaría entre sí en diagonal "sin colapsar Madrid".

El alcalde dibuja sobre un papel el actual mapa radial de los años 40 del siglo pasado y el actual de los desdoblamientos de las autovías y, mientras explica, las conexiones de las comunidades del norte y del sur a través del centro de la península, deja patente el hueco que falta por llenar entre Teruel y Cuenca. "Es una infraestructura interesante a nivel nacional. En el mapa nacional de autovías solo queda ésta", dice el alcalde.

Castilla-La Mancha y Cataluña, dice, están muy mal comunicadas y tienen que hacerlo a través de Madrid o Valencia, y para Cataluña y Aragón la conexión que falta es "fundamental" para incrementar sus intercambios comerciales.

"A Cataluña le interesa conectar en diagonal con Castilla-La Mancha y Andalucía y le interesa a Aragón porque abres mercados con Castilla-La Mancha sin colapsar Madrid y le interesa a Castilla-La Mancha porque le abre mercados con Cataluña", afirma.

Así, preguntado que le pediría a Rajoy por 'Reyes', Blasco responde sin vacilar: "el tren con Valencia y Zaragoza y la autovía a Madrid por Cuenca". También cita, con los mismos argumentos, la línea de ferrocarril Valencia-Teruel-Zaragoza o la autovía Zaragoza-Alcañiz-Levante, que considera "imprescindible".

"El tren con Valencia y Zaragoza es un viaje-aventura: sales en tren y no sabes como volverás, si en autobús, andando o en bici", porque Renfe lleva muchos años sin invertir en esa línea que, en algunos tramos, el tren "tiene que ir a 40 por hora" porque "la vía no lo aconseja", señala.

En cualquier caso, Blasco es consciente de que la situación económica hace inviable acometer estas infraestructuras.

"Ahora que no hay dinero es utópico decir que te hagan las obras. Es el momento de hacer proyectos; sanear los agujeros que se va a encontrar el nuevo gobierno, y hacer proyectos. El día que mejore la economía ya tengo el proyecto hecho", afirma.

Pero hablando de dinero, lo que si le pedirá Blasco a Rajoy y a la presidenta de la Comunidad, Luisa Fernanda Rudi, es que firmen el Fondo de Inversiones de Teruel por otros cinco años (el actual vence el próximo 31 de diciembre) con unas aportaciones de 60 millones de euros anuales.

Ese fondo permitiría que "terminen de arrancar" proyectos como Motorland, se ponga en marcha el aeródromo de Teruel, el observatorio astrofísico y las pistas de Javalambre y Valdelinares, que son un atractivo para Valencia, concluye.