ANTROPOLOGÍA

La licencia de obras del Museo Etnográfico está pendiente desde hace siete meses

El proyecto, ya redactado, se encuentra a la espera de ser supervisado por técnicos del Ministerio de Cultura.

El antiguo orfanato, donde se ubicará el museo, está en desuso desde hace dos décadas.
La licencia de obras del Museo Etnográfico está pendiente desde hace siete meses
ANTONIO GARCíA

La Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Teruel lleva siete meses esperando que el Ministerio de Cultura remita el proyecto de ejecución del Museo Nacional de Etnografía para conceder la licencia municipal de obras. El concejal del área de urbanismo, Jesús Fuertes, señaló que el organismo estatal solicitó a la Gerencia el citado permiso en el mes de octubre del año pasado. Emitió inicialmente un informe favorable, pero reclamó al Ministerio el proyecto de ejecución completo como requisito indispensable para otorgar la licencia. Fuertes explicó que desde entonces no ha habido respuesta.


«Creemos que o bien está muy verde o el Gobierno central no tiene dinero para afrontar el proyecto», indicó Fuertes. El concejal, que considera el Museo de Etnografía como una actuación «interesante», sostiene que «se ve poca intención de ejecutarlo, porque va muy lento y no se está percibiendo agilidad».


La candidata a la alcaldía por el PSOE, Mayte Pérez, señalaba recientemente que los plazos se están cumpliendo según lo previsto. «El Museo de Etnografía no está parado», replicaba. «Los procedimientos administrativos son los que son. A finales de año se licitarán las obras, por lo que veremos cómo se hace una realidad».


De hecho, el Museo, que fue una promesa electoral de José Luis Rodríguez Zapatero con Teruel, solo contó en los presupuestos generales del Estado de 2010 con una partida de 100.000 euros, destinada a la redacción del proyecto, frente a los 11 millones anunciados en total, con lo que ya entonces se preveía un retraso de la iniciativa de dos años.


Proyecto ya redactado


El Museo es un diseño del estudio de arquitectos Olano y Mendo, ganadores del concurso de ideas presentado para tal fin. A finales del año pasado se entregó en el Ministerio el proyecto de ejecución, un trabajo compuesto por más de cuatrocientos planos que contempla una innovadora idea para acondicionar la antigua Casa de la Misericordia de Teruel -más conocida como hogar Comandante Aguado- como moderno museo.


La recepción de este documento por parte del organismo estatal es, sin embargo, «un proceso administrativo complejo», según reconoció Alberto Mendo, uno de los redactores. Los encargados de supervisar el proyecto de ejecución en el Ministerio solicitaron a los arquitectos una ampliación de la documentación, que ya fue enviada en mayo a Madrid, por lo que se espera que la aprobación definitiva esté lista en los próximos meses. Este expediente se trasladará nuevamente a la Gerencia de Urbanismo de Teruel para obtener la licencia municipal.


Mientras tanto, el estudio de arquitectura Olano y Mendo trabaja en el proyecto de museografía del centro, un informe que determinará qué piezas y cómo se exponen. Alberto Mendo destacó la importancia de esta actuación, cuya misión principal consistirá en proponer una selección de los objetos que finalmente se exhibirán. «Hay que tener en cuenta -dijo el arquitecto- que únicamente se va a mostrar al público 2.500 piezas de las 100.000 que el Museo tiene en depósito». El edificio contará con una superficie de 12.000 metros cuadrados y constará, entre otros elementos destacables, de una pérgola de vidrio en la fachada principal.