ESCOMBRERA DE RESIDUOS

Escucha impulsa la retirada de toneladas de residuos de carbón del Valle de las Cenizas

Un acuerdo suscrito entre la empresa Balalva y la cementera Cemex permite desbloquear la recuperación de la escombrera.

La recuperación del Valle de las Cenizas, una enorme escombrera de residuos de la central térmica de Escucha, es ya un hecho. La empresa Infraestructuras Balalva S. L. está retirando estos restos desde hace tres meses tras haber alcanzado un acuerdo con el grupo Cemex y después de numerosas conversaciones propiciadas por el Ayuntamiento de la localidad.

La incorporación de Cemex -uno de los principales productores de cemento de España, socio mayoritario de Cementos Andorra S. A, y titular de la fábrica cementera de Morata de Jalón (Zaragoza) ha impulsado la retirada de las cenizas acumuladas desde hace más de cuarenta años en la escombrera de colosales dimensiones.

La actuación se encontraba paralizada desde 2005, cuando la anterior Corporación municipal de Escucha adjudicó la concesión de la recuperación ambiental de esta zona a la empresa Balalva -radicada en Castellón- por un periodo de 20 años. La crisis económica bloqueó el proyecto de forma indefinida. Ahora, no obstante, la iniciativa ha experimentado un renovado impulso.

El alcalde de Escucha, Javier Carbó, señaló que tras un largo parón, se ha logrado retomar la explotación por el acuerdo de ambas empresas, «que les permitirá trabajar conjuntamente durante los próximos cinco años». Para Carbó, la entrada de Cemex en la concesión «da unas ciertas garantías para que el producto tenga un mercado y por lo tanto se retome el proyecto de la recuperación de la escombrera».

El alcalde agregó que esta medida supone resolver un grave problema ambiental producido por las montañas de escombros, cuyo volumen se estima en unos 15 millones de metros cúbicos de cenizas.

Son los residuos procedentes de la central térmica de Escucha por la quema desde los años sesenta del siglo pasado de miles de toneladas de carbón. El primer edil no cree posible que en estos próximos cinco años, plazo fijado por el convenio entre las dos empresas, se eliminen todos los restos depositados en el Valle de las Cenizas durante más de cuatro décadas.

Fabricación de cemento

Las cenizas serán utilizadas para la fabricación de cemento y, debido al proceso de combustión al que ha sido sometido el carbón que las produce, no se requiere su tratamiento previo.

La retirada de los escombros se está realizando, según dijo Carbó, de una «forma ordenada». «El trabajo es similar al de una cantera», agregó tras manifestar que el impacto paisajístico se ha reducido notablemente al haberse cubierto las montañas de cenizas con tierra vegetal.

Está previsto que se retiren entre 2.000 y 3.000 toneladas de cenizas semanales, unas cantidades que, además, pueden proporcionar beneficios económicos al Ayuntamiento de Escucha. Javier Carbó explicó que, según las estimaciones aproximadas, la extracción de este producto puede reportar al Consistorio en estos cinco años unos 500.000 euros. «Es una cifra aproximada -repitió Carbó-, contando con que el canon se cifró en 0,5 euros por tonelada, pero el volumen de cenizas extraído puede variar; no es fijo».

Con todo, el alcalde considera que lo importante es que «al final se limpie esa zona» y que haya dado la posibilidad de generar tres puestos de trabajo. Las expectativas son que en un futuro inmediato se puedan llegar a generar hasta 20 empleos entre transportistas, personal dedicado a las básculas y máquinas de extracción. «La coyuntura económica es difícil, pero solo la creación de tres puestos de trabajo en esta comarca, aquejada de un fuerte desempleo, es ya motivo para la satisfacción», dijo el edil.