Teruel se convirtió ayer en la capital del amor eterno o, cuando menos, muy duradero. Ochenta matrimonios de toda España fueron homenajeados al haber cumplido sus bodas de oro y plata, es decir, por seguir juntos tras 50 y 25 años de convivencia. Durante todo el fin de semana, las parejas han sido agasajadas por el Centro de Iniciativas Turísticas de Teruel (CITT), que organiza la fiesta desde hace más de 30 años con el objetivo de mantener viva la leyenda de los Amantes y promocionar la ciudad.

Con una gran vitalidad y sin acusar el peso de los años -muchos son septuagenarios y octogenarios-, los matrimonios participaron en todos los actos programados en su honor. Desde el viernes, acudieron a recepciones oficiales y realizaron visitas turísticas. Ayer por la mañana, buena parte de las parejas recorrieron las empinadas calles de Albarracín para almorzar después en un restaurante de Teruel. «Está saliendo todo muy bien. Tienen mucha ilusión y un humor excelente; aplauden a cada momento en agradecimiento por las atenciones que reciben», relató Emiliano de la Cruz, el presidente del CITT.

Por la tarde, llegaban emocionados y algo nerviosos al acto institucional preparado en el Ayuntamiento de Teruel. La mayoría cogidos del brazo o de la mano, coincidían en calificar de «inolvidable» la fiesta que estaban viviendo. Así opinaban Eugenio Saura e Isabel Julián, los dos de Teruel y de 78 años de edad, cincuenta de los cuales los han pasado juntos. Para ellos, «la paciencia y el amor» son la clave de la convivencia. «En casa, los dos mandamos por igual; si acaso ella un poco más, pero poco», comentó él. Afirmaron que siempre han vivido «muy bien y sin grandes dificultades ni disgustos», si bien ahora les tiene preocupados la crisis económica.

«Queda afecto y pasión»

Jesús Salafranca y Pilar Calpe, de Alcañiz, fue otra de las parejas galardonadas en sus bodas de oro. Ambos señalaron que siguen llevándose «estupendamente» y que tras cinco décadas casados mantienen vivos «el afecto, la amistad y la pasión». «Cuidarse mutuamente, y también aguantarse es nuestra fórmula para vivir el día a día», comentó el esposo.

A Laura Escós y Eloy García, de Zaragoza, ni la silla de ruedas de ella ni las muletas de él les impidieron viajar a Teruel para celebrar sus bodas de oro. «¿Quién se pierde esta fiesta en la que lo estamos pasando tan bien?», dijo la mujer.

Todos los matrimonios fueron obsequiados con una Medalla de los Amantes. Ayer, en el salón de plenos del Consistorio, recibieron también distinciones el Club Voleibol Teruel, la Hermandad de Donantes de Sangre, el artista turolense Pascual Berniz y la periodista Pepa Bueno, que inició su andadura profesional en la capital turolense hace 24 años. Las parejas de las distintas comunides autónomas firmaron en el libro de honor del Ayuntamiento.

El alcalde de Teruel, Manuel Blasco, cerró el acto enumerando los cambios experimentados por la ciudad en los últimos 25 años. «La plaza del Ayuntamiento es hoy peatonal, las torres mudéjares han sido restauradas; tenemos Dinópolis y un nuevo Mausoleo de los Amantes».