El pleno del Ayuntamiento de Escucha declaró el pasado lunes incorrectas las retribuciones que han venido percibiendo desde las últimas elecciones municipales -en mayo de 2007- el alcalde y aquellos concejales con delegaciones, cantidades que suman casi 54.000 euros. La medida contó con los votos a favor de los tres ediles de CHA, el del concejal del PP y otro del PSOE. Otros tres ediles socialistas no acudieron al pleno.

Según recoge el acuerdo, en junio de 2007 se asignaron cantidades fijas y con carácter periódico -o lo que es igual, un sueldo- a determinados miembros de la Corporación sin que previamente les hubiera sido reconocida por el pleno la dedicación exclusiva ni parcial.

Fuentes técnicas municipales añadieron que, por tanto, tampoco fue publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la calificación de los concejales, otro de los pasos preceptivos. Además, estos no fueron dados de alta en la Seguridad Social. Por todo ello, la corporación municipal estima que esos sueldos deben anularse.

La decisión supone, en la práctica, que nueve concejales tendrían que devolver cantidades que van de los 18.000 a los 1.050 euros, correspondientes al periodo entre mediados de 2007 y octubre del año pasado, cuando la secretaria sustituta se dio cuenta del fallo y suspendió los pagos, según explicó ayer el teniente de alcalde, Valentín Salvador, del PP.

El acuerdo afecta principalmente a los miembros de la corporación municipal formada tras los comicios, con el socialista José Julio García Mendoza como alcalde, pero también a la que resultó tras la moción de censura de febrero de 2009, que otorgó la alcaldía a la CHA con el apoyo del PP.

En el primer caso, el alcalde cobró 900 euros mensuales; el teniente de alcalde, 600 y los concejales con delegaciones, 300 euros. Los actuales ediles con delegaciones venían percibiendo 150 euros mensuales. Así, quien más dinero habría recibido sería el anterior alcalde socialista, José Julio García Mendoza, con un total de 18.000 euros.

De hecho, García Mendoza consideró ayer que el acuerdo adoptado por el pleno es una "pobre venganza" del actual equipo de gobierno contra él y el resto de los concejales socialistas, quienes recientemente reprocharon al Ayuntamiento no haber defendido con suficiente esfuerzo el despido de un trabajador municipal, lo que supuso el pago de una indemnización a dicho empleado.

El anterior alcalde afirmó que "no hubo ninguna mala intención" al asignar un sueldo a los concejales y que, de haber sabido que era necesario un pleno previo, se habría hecho. Agregó que, sea como fuere, su dedicación a la Alcaldía fue exclusiva. "Había días que me iba a comer a casa a las cinco de la tarde", se defendió.

No obstante, se abre un plazo de entre 10 y 15 días para que los afectados presenten alegaciones. Después, el expediente será enviado a los juzgados para su tramitación. García Mendoza afirmó que la decisión del equipo de gobierno es un capítulo más en la convulsa vida política que hay en Escucha, "con posturas radicalizadas y un pueblo dividido y muy difícil de llevar".