TERUEL

Burbáguena celebrará el 23 de octubre una fiesta para financiar la reparación de su iglesia

También ofrecerá la posibilidad de apadrinar por 20 euros piedras del templo, cerrado por amenaza de ruina.

El sacerdote de Burbáguena, Héctor Abel, en la iglesia parroquial, con las bóvedas agrietadas.
Burbáguena celebrará el 23 de octubre una fiesta para financiar la reparación de su iglesia
ANTONIO GARCíA

Burbáguena celebrará una fiesta lúdico-reivindicativa los días 23 y 24 de octubre para recaudar fondos con los que consolidar su iglesia parroquial, cerrada al culto desde el pasado verano debido a su deterioro arquitectónico. El Ayuntamiento y los vecinos preparan un fin de semana festivo con el que pretenden generar unos ingresos con los que contribuir a la restauración del templo. La iniciativa se concreta dos meses después de que los miembros de la corporación anunciaran que no formarán parte de ninguna lista electoral en las elecciones locales de 2011 si la Adminitración no se compromete antes a intervenir en la iglesia. El órdago de los concejales fue avalado por los vecinos, que han firmado un compromiso en los mismos términos.


La fiesta incluirá actuaciones musicales y una comida popular preparada por los vecinos. También se venderán camisetas alusivas, lotería y velas. "Los vecinos colaborarán con lo que puedan", dijo Benedí. Tanto los ingresos por la barra de bar de la verbena como los derivados de las raciones servidas o de la venta de productos se destinarán a la actuación más urgente de la iglesia: la consolidación estructural del edificio para evitar que se derrumbe. El programa de actividades se perfiló a partir de un debate a través de internet.


Además, durante la fiesta se pondrá en marcha una campaña de "apadrinamiento" de las piedras de la iglesia mediante donatidos que oscilarán entre 10 y 20 euros. Esta posibilidad se extenderá posteriormente a los cibernautas a través de internet mediante una página web. Las donaciones se podrán realizar en la cuenta bancaria que se abrirá con los fondos ingresados en el fin de semana festivo.


El precedente de Miravete


La recaudación de fondos a través del patrocinio de piedras del templo sigue una fórmula que ya intentó Miravete de la Sierra a través de un apartado de su exitosa y premiada web divulgativa elpuebloenelquenuncapasanada.com. El portal permitía a los internautas comprar simbólicamente tejas de la iglesia, un donativo destinado a restaurar la deteriorada cubierta de la iglesia. El alcalde de Miravete, José Listo, advirtió, no obstante, de que la iniciativa "no fue eficaz" en este sentido porque la recaudación obtenida, 2.250 euros, se quedó muy lejos de los 60.000 necesarios para acometer el proyecto. Solo dio para reparar el tejadillo de una capilla.


Listo agregó que la agencia Shackleton manifestó su disposición a financiar directamente la reparación, pero la reunión con el alcalde en la que el asunto iba a tratarse no llegó ni siquiera a celebrarse mientras los ecos de la exitosa web se apagaban.


La alcaldesa de Burbáguena explicó que "hay mucha gente implicada en los preparativos" de la fiesta. Añadió que unas treinta personas trabajan para organizar los actos y la página web y, unos doscientos voluntarios colaborarán en la organización de las actividades previstas.


Silvia Benedí advirtió de que los miembros de la corporación y el vecindario mantienen su compromiso de no formar parte de listas electorales en los comicios de 2011. Aclaró, no obstante, que confía en "no tener que llegar a ese extremo, porque parece que el asunto se está moviendo, aunque no sea con la celeridad que a todos nos gustaría".


Tras una primera reunión con el director General de Patrimonio, el Ayuntamiento está a la espera de mantener contactos con responsables de la Consejería de Obras Públicas y el Obispado de Teruel para recabar su compromiso de colaborar en la restauración de la iglesia, con un coste cifrado en 1,3 millones de euros.


El templo de Nuestra Señora de los Ángeles, de estilo barroco, se remonta al siglo XVIII. Fue declarado Bien de Interés Cultural en 2002 por la DGA. Su deterioro arquitectónico desembocó en el cierre al culto por miedo al derrumbamiento, un peligro del que alertaron varios informes técnicos.