SANIDAD

El escáner del hospital Obispo Polanco se ha averiado dos veces en menos de siete meses

Algunos sindicatos piden que el aparato, comprado hace 10 años, sea renovado para evitar demoras a los pacientes.

Para aligerar las listas de espera, el hospital recurre a veces a una unidad móvil de escáner, en la foto.
El escáner del hospital Obispo Polanco se ha averiado dos veces en menos de siete meses
A. G.

El escáner o TAC (Tomografía Axial Computerizada) del hospital Obispo Polanco de Teruel, el único que hay para toda la mitad sur de la provincia, con una población de 85.000 habitantes, se ha estropeado dos veces en menos de siete meses. La primera avería, que duró una semana, se produjo el 19 de enero de este año; la segunda se originó el pasado día 11 de este mes hacia el mediodía y quedó solventada el viernes siguiente a la misma hora aproximadamente.


Mientras que en enero fueron un centenar de pacientes los afectados por los retrasos y molestias generados por la avería, esta vez, al tratarse de un periodo de tiempo más corto el que ha estado sin funcionar la máquina, han sido una veintena de personas las que han visto cómo se demoraba su cita para realizarse la prueba diagnóstica por escáner. Tal y como ocurrió a principios de año, todos los casos graves o urgentes han sido derivados al hospital Miguel Servet de Zaragoza.


En ambas ocasiones el problema ha consistido en la rotura de la misma pieza, un tubo, si bien desde la Consejería de Salud y Consumo afirmaron ayer que esta coincidencia no resulta tan extraordinaria y que puede ocurrir dentro del funcionamiento normal del aparato. Las mismas fuentes oficiales manifestaron que estas averías tan cercanas en el tiempo "no tienen que ver con la antigüedad de la máquina", que fue comprada, no obstante, hace ya 10 años y por lo cual su vida media útil se va agotando.


Mayor lista de espera

Algunos sindicatos sanitarios plantean que el escáner debería ser ya renovado para evitar las molestias que las averías ocasionan tanto a pacientes como a profesionales. Estiman que las dos roturas han contribuido a alargar la lista de espera para esta prueba radiológica, que ya de por sí es abultada. Añaden que, por otro lado, en una década la tecnología empleada en estas máquinas ha avanzado mucho y existen ya aparatos mejores que el que se utiliza en Teruel.


La secretaria provincial del sindicato de enfermería SATSE, Rosario Hernández, manifestó que "si el aparato empieza a dar problemas, habría que cambiarlo, evitando así que sigan creciendo las listas de espera".


Por su parte, el delegado de Sanidad de CC. OO. en Aragón, Rubén Eito, opinó que "no es normal que se averíe tanto el aparato". Este sindicalista explicó que, aun sin conocer el origen de la rotura -señala que la duración de un TAC depende generalmente de las características que le imprime la casa fabricante, de su nivel de utilización y de que se emplee en un ambiente con la temperatura adecuada-, "lo que queda en evidencia es que el hospital de Teruel no está suficientemente dotado". Eito añadió que, puesto que el Gobierno aragonés tiene previsto construir un nuevo hospital en Teruel, "la DGA debería ir adquiriendo ya el nuevo material".


Desde la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) en Teruel lamentaron las molestias que las averías del TAC generan a los usuarios y a los profesionales. Esta organización médica afirmó que, teniendo en cuenta que el pasado mes de mayo la demora para el TAC era -según la web del hospital- de 80 días y que en la actualidad hay médicos y enfermeros de vacaciones que no son sustituidos, la espera debe encontrarse ahora en cuatro meses aproximadamente. "El hospital se cae de viejo y ya se sabe que a perro flaco todo son pulgas", indicó una fuente de la CESM.


La delegada sindical de Sanidad de UGT en Teruel, Pilar Marín, señaló que lo ideal sería contar en el Obispo Polanco con la última tecnología en aparatos de escáner, "pero el país no pasa ahora por un momento de bonanza y las máquinas son muy costosas". Un escáner cuesta alrededor de un millón de euros. Respecto a las recientes averías afirmó que "son una fatalidad, pero no es para poner el grito en el cielo". "Pese a los problemas, el servicio se está dando, el hospital se esfuerza y eso es lo importante", agregó Marín.