El viaducto Viejo de Teruel, bautizado recientemente como de Fernando Hué en honor al ingeniero que lo proyectó, fue cortado durante toda la mañana de ayer -de 7.00 a 15.00- y permanecerá hoy cerrado en la misma franja horaria, debido a las labores de limpieza que se llevan a cabo para eliminar las pintadas que hay en los bancos de piedra de este puente.

El sistema utilizado es la proyección de chorros de arena sobre la zona afectada, más caro que el empleo de agua, pero más seguro para el tipo de piedra usada en la construcción del viaducto, que es muy porosa y podría sufrir problemas de humedad. Así lo explicó ayer Manuel Fuertes, el jefe de Operaciones de la empresa contratada por el Ministerio de Fomento para la conservación del Viaducto, la UTE formada por Api Conservación y Elsanex.

Las pintadas, realizadas con aerosoles, fueron cubiertas hace algunos meses con una capa de pintura del color de la piedra, pero el resultado no fue el deseado y se acordó su eliminación con chorros de arena. La empresa tiene previsto abrir esta tarde el puente, una vez acaben definitivamente los trabajos.

Terminado de construir en 1929, el viaducto Viejo está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC). Está considerada una de las obras de ingeniería civil más importantes de España en su época. Su función fue facilitar la expansión urbanística de Teruel hacia el sur y hoy es la conexión peatonal entre el Centro Histórico y el barrio del Ensanche. La construcción en los años 90 del siglo pasado del viaducto Nuevo, con dos carriles en cada sentido para el tráfico, permitió reservar el anterior para los peatones.

Vandalismo

Fuertes afirmó que el Viaducto de Fernando Hué está en muy buen estado de conservación. "El único problema es el vandalismo que sufre", señaló el jefe de Api Conservación y Elsanex. También en el viaducto Nuevo aparecen con frecuencia pintadas, pero estas son más fáciles de eliminar al encontrarse en superficies metálicas que pueden ser repintadas. "Lo difícil es quitar la pintura de la piedra", dijo Fuertes.

Las tareas de limpieza son desempeñadas por tres operarios. Se optó por cortar el tránsito ante el peligro de que los chorros de arena pudieran afectar a algún viandante. La empresa, que se ocupa del mantenimiento de la red viaria del Estado en el sector de Teruel -uno de los cuatro en que está subdividida la provincia-, lleva realizadas más de 20.000 operaciones en los tres últimos años.