TERUEL

El buen tiempo llevó hasta la feria rural de Aguaviva a más de 10.000 visitantes

Además de comprar en los puestos de venta, la gente pudo disfrutar de otras actividades, como el IX Campeonato de Autocross de la localidad y el concurso de ovejas de raza.

Las mascotas fueron uno de los atractivos de la feria para los más pequeños.
El buen tiempo llevó hasta la feria rural de Aguaviva a más de 10.000 visitantes
ANA. C. MARTÍNEZ

La localidad bajoaragonesa de Aguaviva cerró ayer su XVI Feria de Productos y Servicios del Medio Rural con gran éxito de asistencia. A falta de un recuento oficial, el teniente de alcalde del municipio, Emiliano Monterde, calculó que se habrían alcanzado "las cifras del año pasado, es decir, más de 10.000 visitantes".

 

El buen tiempo acompañó a lo largo del sábado y el domingo a todos los vecinos y foráneos que se acercaron a disfrutar de los 40 stands fijos y los 155 puestos de venta ambulante que llenaron las calles de la localidad. "Decidimos conservar la feria en la calle porque vimos cómo en otras localidades, al cerrarla bajo techo, empezó a mermar la participación", explicó el alcalde de Aguaviva, Luis Bricio. En su opinión, resulta más favorable que el evento se mantenga al aire libre, "aunque algún año haya que suspenderlo por nieve o lluvia, ya que, de esta forma, la fiesta se vive en todo el pueblo".

 

"A mí me gusta mucho esta feria, está muy bien. Vengo todos los años, es una excusa para regresar a Aguaviva y, además, da mucha vida al pueblo", explicó Eugenia Ciprés, mientras repasaba todas las compras que llevaba en su bolsa : "queso, algo de embutido y ahora creo que me voy a comprar un turrón", afirmó divertida. "Es que los puestos de comida me gustan más, pero es bueno que haya de otras cosas porque así favorecen la variedad", añadió. Y es que desde quesos artesanales hasta pijamas, en la feria de Aguaviva se puede encontrar de todo. Pero no solo los puestos que adornan las calles del municipio ofrecen variedad, los actos programados también aportaron un amplio abanico de posibilidades para los visitantes.

 

Los amantes de la velocidad y el olor a gasolina pudieron disfrutar del IX Autocross de Aguaviva en el remozado circuito permanente de la localidad. La prueba, organizada por el Automóvil Club Circuito Guadalope, supuso la última carrera puntuable para el Campeonato de Aragón de esta especialidad.

 

Los pilotos se mostraron satisfechos con los cambios registrados en el circuito, acusando, sobre todo, los metros de longitud y anchura que ha ganado el recorrido tras las mejoras.

 

Para aquellos que preferían la naturaleza al rugido del motor, la XVI edición de la feria celebró el concurso de ovejas de raza ojinegra, maellana y rasa aragonesa, en el que los ganaderos de la zona presentaron sus mejores lotes de animales. Junto a las ovejas, los visitantes también pudieron disfrutar de una pequeña muestra equina, en la que se exponían algunos burros para su venta, animales que hicieron las delicias de los más pequeños asistentes a la feria.