TERUEL

Teruel soporta con fuertes heladas el último embate del temporal

La capital y Calamocha registraron ayer las temperaturas mínimas de Aragón, con 6,3 y 6,5 grados bajo cero, respectivamente. Los termómetros podrían bajar hoy hasta menos 8.

El temporal de nieve que en los últimos días azotó buena parte del país se despedía ayer de la provincia de Teruel con fuertes heladas. La capital, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), registró a las siete de la mañana 6,3 grados bajo cero, frente a los 2,2 negativos de Huesca y los tres grados positivos de Zaragoza.


Muchas de las aceras de las calles de la capital amanecieron cubiertas de una capa de hielo que hacía imposible caminar por ellas y de los tejados y las fuentes colgaban auténticas estalactitas de agua helada de hasta 50 centímetros de largo. El sol no llegó a brillar en ningún momento del día mientras que una persistente niebla impidió que la nieve caída días atrás se fuera derritiendo.


Aún fue más baja la temperatura registrada en Calamocha. De acuerdo a la información ofrecida por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) en su página web, la estación meteorológica más próxima a la localidad, la de Valdellosa, marcó 6,5 grados bajo cero a las cinco de la madrugada de ayer.


Según los datos de la CHE, Calamocha y su entorno más próximo llevan desde el pasado día 6 con temperaturas bajo cero, sin que el mercurio haya superado a lo largo de ningún día los cero grados. No obstante, el punto de toma de estos datos se encuentra en la sierra, a mayor altitud que la localidad, por lo que dentro de la población las temperaturas han podido ser algo más elevadas.

"Ya estamos cansados"


"La nieve es muy bonita, pero llevamos tres días con las calles heladas, apenas podemos salir a comprar y ya estamos todos un poco cansados de tanto frío", explicó ayer una vecina de Calamocha, María Teresa. La mujer relató que al helarse la nieve caída debido al bajón de temperaturas, ni siquiera pudo meter su coche al garaje.


La misma fuente explicó que, de todos modos, el frío no es en Calamocha ninguna novedad. De hecho, los vecinos suelen proveerse de alimentos cuando llega el invierno llenando arcones congeladores que tienen en sus casas. "Estamos muy acostumbrados", dijo.


Las previsiones apuntan a que el frío continuará hoy. En las comarcas de la Comunidad de Albarracín, Jiloca, Gúdar y Maestrazgo, los termómetros podrían descender esta mañana hasta los ocho grados bajo cero. Por otro lado, en la comarca del Bajo Aragón, donde el clima es habitualmente algo más suave, se espera que las temperaturas se sitúen en los cuatro grados bajo cero, según datos de la AEMET.


No obstante, las carreteras de la provincia recuperaron ayer, prácticamente, la normalidad después de dos días en los que más de 1.500 kilómetros estuvieron afectados por la nieve y en los que la autovía A-23 y algunas carreteras Nacionales y Autonómicas, como la N-211 (Guadalajara-Fraga), la N-234 (Sagunto-Burgos) y la A-222 (Montalbán-Zaragoza), permanecieron cortadas temporalmente al tráfico pesado.


Desde primera hora de la mañana, la red estatal estuvo abierta al 100% sin que fuese necesario el uso de cadenas para circular por ninguna de las carreteras. Solo siete tramos de la red secundaria seguían cubiertos de nieve y era necesario el uso de cadenas para circular por ellos. Los problemas se concentraron en la zona de Gúdar-Javalambre, el Maestrazgo, la Sierra de Albarracín y las Cuencas Mineras. En total, la circulación resultaba difícil a lo largo de un centenar de kilómetros.


En muchos casos eran carreteras de acceso a poblaciones como Armillas, Alacón, Rudilla o Fonfría. En otros, fueron pistas que acortan el camino a Fortanete, Valdelinares, Cantavieja o Mosqueruela. También la carretera que une Cedrillas y Alcalá de la Selva, seguía afectada por la nieve.