TERUEL

Petición firme para convertir en una vía verde la fallida línea de tren Teruel-Alcañiz

La Comarca Comunidad de Teruel ha formulado una petición al Departamento de Obras Públicas del Gobierno de Aragón para que considere la posibilidad de convertir la frustrada línea de ferrocarril Teruel-Mequinenza -conocida popularmente como Teruel-Alcañiz- en una nueva vía verde.


La solicitud se ha llevado a cabo por iniciativa del alcalde de Alfambra, Amador Villamón, quien considera que esta infraestructura "permitiría vertebrar realmente la provincia de Teruel". El interés de esta localidad por el viejo trazado de ferrocarril, cuya construcción se inició en los años veinte del siglo pasado y se abandonó antes de concluirse, es patente. De hecho, el Ayuntamiento reprodujo la silueta de una máquina de tren que se puede apreciar en el puente de la Val.


El presidente de la Comarca Comunidad de Teruel, José Luis López, señaló que la petición al Gobierno de Aragón va encaminada a que "se inicien los estudios de viabilidad del proyecto". Reconoció que probablemente no es este el mejor momento para afrontar inversiones, "porque a lo mejor hay otras prioridades, pero por lo menos queremos que se contemple la posibilidad".


López está convencido de que una infraestructura de estas características dinamizaría turísticamente el territorio de la comarca, parte de la cual ya cuenta con la vía verde de Ojos Negros, que enlaza la provincia con el Puerto de Sagunto.


Enlace con Utrillas

El proyecto que propone la Comarca de Teruel se centraría en el acondicionamiento de un tramo comprendido entre Teruel y Utrillas y una vez allí enlazar con la antigua línea que comunicaba esta localidad con Zaragoza, para la cual también reclama la Comarca de Cuencas Mineras su habilitación como vía verde. "Constaría de unos 170 kilómetros, más o menos, incluyendo el trazado que usaba la empresa Minas y Ferrocarriles de Utrillas para transportar el carbón a Zaragoza", explicaba Amador Villamón.


La línea, a la que únicamente le faltaban los raíles para poder funcionar, está salpicada por numerosas infraestructuras, cuyo estado de conservación "es más que aceptable", a juicio de Villamón. "Son estaciones, muelles y apeaderos muy bien hechos y fácilmente recuperables como albergues", explicaba el alcalde de Alfambra.


Puentes, viaductos y túneles, algunos cegados, completan el recorrido de esta línea por el valle del Alfambra. El trazado coincide con la nacional 420 en tres puntos, pero resolver este problema no reviste especial complicación, en opinión de Amador Villamón.


La primera parte del recorrido, entre Teruel y Alfambra, fue acondicionada hace varios años con fondos de la Diputación Provincial, de manera que en la actualidad es posible circular por esta vía sin ningún obstáculo.


El alcalde de Alfambra considera que la mejora de esta línea supondría el aprovechamiento de unos recursos con fines turísticos, en una zona cuya principal fuente de ingresos se ha centrado en la agricultura. "Queremos dinamizar turísticamente la zona, ya que la agricultura está en estos momentos en declive", mantiene.


Con esta nueva infraestructura, la provincia estaría surcada de norte a sur con una importante red de vías verdes, la mayor de las cuales es la de Ojos Negros, que aprovecha el trazado del ferrocarril de Sierra Menera. Inaugurada a principios de año, es la de mayor longitud de la Península y parte de su recorrido atraviesa la Comunidad Valenciana.