TERUEL

La capital recibe cuatro mil visitantes más al mes desde la finalización de la autovía

Ayer abrió sus puertas el salón del turismo gastronómico, con el sector de la hostelería en continua evolución.

La III edición del salón del turismo gastronómico abrió ayer sus puertas en el palacio de exposiciones y congresos de la Teruel con los hosteleros de la provincia como los grandes protagonistas, un sector que se muestra claramente optimista, a pesar de la desaceleración económica que padece el país. Al menos, eso se desprende de las declaraciones efectuadas por responsables institucionales y empresarios.


El viceconsejero de Turismo del Gobierno de Aragón, Javier Callizo, destacó las cifras alcanzadas el año pasado en cuanto a afluencia turística y a ocupación hotelera en la Comunidad Autónoma, "muy superiores -dijo- a la media nacional". Y dentro de estas, hizo especial hincapié en las de la provincia de Teruel: "Las mejores", dijo.


Callizo explicó que la evolución que durante los primeros meses del año está experimentando en la provincia este sector hace concebir esperanzas de que las cifras de 2008 sean superiores a las de 2007. Como ejemplo agregó que "los últimos datos de enero y febrero ponen de manifiesto que Teruel ha recibido 4.000 visitantes más al mes que en el mismo periodo de tiempo del ejercicio anterior".


Para el viceconsejero, el excelente nivel de su gastronomía, al que ha contribuido la Escuela de Hostelería, así como el hecho de que la temporada de nieve "haya sido muy buena como consecuencia de ser el primer lugar que abre temporada", presagian un futuro esperanzador. Según dijo, Teruel concentra en estos momentos el 10% de las pernoctaciones que se registran en Aragón.


La celebración de la Exposición Internacional de Zaragoza puede ser, en opinión de Callizo, un motivo asimismo de buenos pronósticos. "Haber si somos capaces -advirtió- de captar para Teruel a los turistas que lleguen a Zaragoza con la Expo".


Zaragoza, el gran potencial


Tanto para Javier Callizo como para el presidente de la Asociación Provincial de Hostelería, Fernando Cánovas, la finalización de la autovía Mudéjar ha sido decisiva para el sector. El primero considera que la nueva vía de comunicación "está acercando Teruel a los zaragozanos, que hasta ahora habían mostrado una cierta pereza para viajar a esta provincia".


Cánovas subrayaba que el turismo de Zaragoza "está por descubrir". Según explicó, Dinópolis "abrió un proceso de mayor relación con la capital aragonesa que ahora con la autovía se ha incrementado".


La mejora de las comunicaciones ha influido, igualmente, en un mayor flujo de turistas extranjeros, cuya presencia en Teruel se ha duplicado en el último año.


El salón del turismo gastronómico, que este año cumple su tercera edición, es un elemento más del dinamismo que presenta el sector de la hostelería en la provincia. Fernando Cánovas señaló que cada vez son más los restaurantes que quieren participar en este certamen, porque, según agregó, "ven que hay oportunidad de negocio".


Dijo que el crecimiento del volumen de establecimientos, "al que se suma la calidad de la oferta, han hecho posible esta feria".


Concurso de gastronomía


El palacio de congresos fue ayer un lugar de cita obligada para los amantes del buen comer y del buen beber. Catas de vinos, degustaciones de quesos y de trufa negra se sucedieron durante todo el día, paralelamente a las demostraciones de cocina en vivo, realizadas por los cocineros de varios restaurantes turolenses.


A este salón le precedió durante toda la semana unas jornadas gastronómicas con el arroz con productos de la tierra como plato estrella. Una docena de restaurantes prepararon los menús especiales, que, según Fernando Cánovas, "han tenido una gran acogida por parte de los usuarios".


Entre los actos más celebrados por el público figuró una exhibición gastronómica y degustación de migas, patrocinada por la asociación de panaderos, en la que uno de los platos más tradicionales de la cocina aragonesa se vistió de gala con sofisticadas elaboraciones y productos innovadores. El salón tendrá como broche de oro el III concurso nacional de cocina dotado con 6.000 euros, y cuyo jurado estará presidido por el cocinero Quique Dacosta, propietario del restaurante valenciano El Poblet.