Critican irregularidades en la adjudicación de los puestos del mercadillo de las Bodas de Isabel

La selección de los 250 puestos del mercado medieval que contribuye a ambientar la recreación de la leyenda de los Amantes en Teruel ha generado críticas de artesanos de la provincia, que denuncian irregularidades a la hora de ser admitidos para participar en esta fiesta. La Fundación, sin embargo, se defiende alegando que los criterios para adjudicar un puesto dan prioridad a los comerciantes de la provincia que elaboren mercancías en sus propios talleres y que estas tengan connotaciones con la época en la que se circunscribe la representación teatral.

Las críticas se refieren al funcionamiento de la adjudicación de los puestos, que un artesano bajoaragonés ha calificado de "incorrecto y falto de transparencia". Según especifica, se da la circunstancia de que mercaderes turolenses "han quedado fuera" de la selección de este cotizado encuentro, mientras que a otros "que son revendedores y de fuera de la Comunidad aragonesa han obtenido dos o más puestos".

Según continúa Emilio V. E. –que prefiere ocultar su nombre bajo sus siglas–, en la fiesta medieval basada en la leyenda de los Amantes, que tendrá lugar del 15 al 18 de febrero, no solo no se prima los artesanos de Aragón, "sino que a otros que venden productos fabricados en China y comprados en el polígono madrileño Cobo Calleja se les da varios puestos". A su juicio, este sistema de adjudicación "no es el más adecuado", si se tiene en cuenta que la Fundación "recibe una importante cantidad de ingresos a través de fondos públicos".

Censura, asimismo, los "continuos cambios" de criterio en la selección, ya que afirma que primero fue el tipo de producto y estar registrado como artesano, "luego se dijo que lo importante era participar en la fiesta de otoño y después, la puja". Emilio considera que una institución que recibe subvenciones, debe informar "de forma objetiva" sobre los requisitos para participar en el mercado medieval. "Evitando –subraya– criterios subjetivos y tratos de favor".

También reclama que las pujas admitidas, que por término medio pueden alcanzar los 60 euros por metro cuadrado ocupado en la calle por un puesto, sean públicas, "algo que no se da ahora y que daña la credibilidad y transparencia de la Fundación".

La gerente de la Fundación Bodas de Isabel, Raquel Esteban, ha insistido en que la prioridad son "los artesanos de la provincia y sus productos", si bien reconocía que se hayan podido producir errores en la selección que han sido posteriormente subsanados.

Esteban sostiene que el procedimiento seguido "es limpio y diáfano" a nivel económico, y asegura que partiendo de esa premisa, la Fundación tiene "libertad absoluta para elegir el mercado que quiera". Admite que se hayan podido introducir productos no deseados, ya que se basan en fotos que deben mandar previamente los artesanos. "Pero trabajamos en hacer un buen mercado y que sea convincente", agrega. La directora explicaba que el mercado es una de las principales fuentes de financiación de las Bodas de Isabel, a las que aporta en torno a 80.000 euros anuales. Otros 40.000 se recaudan para el Ayuntamiento. Recordaba que con más de 500 solicitudes para participar en el mercado, "siempre hay personas descontentas que reclaman cuando no son admitidas".