La antigüedad y el arte contemporáneo se dan la mano en el Museo de Teruel

El Museo de Teruel se ha sumado a la celebración del 800 aniversario de la leyenda de los Amantes con una producción que reúne 36 obras de arte contemporáneo, procedentes de diferentes museos y fundaciones, cuya singularidad radica en estar insertadas dentro de sus propias colecciones arqueológicas y etnográficas. Bajo el título ‘Al margen del amor’, se puede ver desde este jueves hasta el 25 de febrero.

La exposición indaga en las distintas formas de amor exploradas por artistas nacionales e internacionales como Jean Genet, Nan Goldin, Txomin Badiola, Cabello/Carceller, Juan Hidalgo, Sophie Calle, Kohei Yoshiyuki o Leonilson. Son obras cedidas por el Reina Sofía, el Museo de Arte Contemporáneo de Castilla León (Musac), el Centro Gallego de Ate Contemporáneo y por colecciones particulares, que propician, según señalaba el director del museo turolense, Jaime Vicente, "una reflexión sobre otras formas de amar, alternativas a las románticas y tradicionales". Agregaba que este objetivo se logra a través de las creaciones de algunos de los artistas más interesantes de la historia reciente, "que revisan o cuestionan los conceptos y narrativas convencionales".

Yuji Kawasima, comisario de la muestra junto con Álvaro Perdices, destacaba la heterogeneidad de creadores y trabajos expuestos que "hablan de las múltiples formas de amar y ser amado". La fotógrafa norteamericana Nan Goldin, por ejemplo, plasma en su obra el registro narrativo y visual de su propio entorno familiar y sentimental en el que viene trabajando desde los años setenta. "Es una suerte de diario generacional", aclaraba Kawasima, quien quiso resaltar la "diversidad geográfica" y por tanto de las visiones sobre el amor que se presentan en el Museo de Teruel. Desde los españoles Carceller o Juan Hidalgo hasta el japonés Yoshiyuki, pasando por el brasileño Leonilson o el Colectivo de Mujeres Creadoras de Bolivia, en esta producción se trasluce cómo se manifiesta el sentimiento amoroso en diferentes territorios.

Las obras de arte contemporáneo salen enriquecidas en esta exposición con el soporte clásico que les brinda el Museo de Teruel. Álvaro Perdices explicaba ayer cómo una vez llegaron al centro turolense se encontraron con una colección de piezas arqueológicas y etnológicas de tanto interés que les hizo replantearse sus ideas.

"Creímos que la muestra tenía que estar relacionada con los propios objetos del Museo", apuntaba el comisario. "Porque –ha continuado– se pueden ver trabajos que están contando cosas parecidas a las piezas de las colecciones antiguas". Citaba como ejemplo una instalación que se puede ver en Teruel realizada en los años ochenta por Juan Hidalgo que plantea un juego con performances y fotografías en tono a los genitales masculinos, "una pieza clave" del arte contemporáneo español perteneciente al Musac y que ha estado expuesta en el Reina Sofía.

"Son imágenes –indicaba Álvaro Perdices– cuyo discurso coincide con el de una pequeña cerámica romana con alusiones al miembro viril o llamadores de finales del siglo XV que hemos encontrado en el Museo".