La campaña de recogida de firmas para reclamar que el futuro hospital de Teruel disponga de una unidad de radioterapia ha culminado un total de 35.320 rúbricas, que este miércoles han sido entregadas en el registro general de la Delegación Territorial del Gobierno de Aragón para su traslado al Departamento de Sanidad. Los representantes de los colectivos promotores de la iniciativa, la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y la Federación de Vecinos San Fernando, se mostraban satisfechos con la respuesta de la ciudadanía, que durante un mes ha secundado masivamente la reivindicación. De hecho, el número de personas que han participado en la campaña representa casi la mitad de la población adscrita al hospital turolense.

De las firmas entregadas, 25.545 se han facilitado en pliegos de papel distribuidos en tres carpetas, y una caja transportaba las 9.766 rúbricas recogidas a través de una plataforma digital.

El presidente de AECC-Teruel, Joaquín Larramendi, confía en que, dada la gran participación en la campaña ciudadana, la petición sea escuchada por el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya. «Es un buen día para registrar las firmas en la DGA –manifestaba con ironía el representante de la oenegé–, porque es la festividad de Santa Lucía, por lo que esperamos que la patrona de la vista ilumine a nuestros gobernantes y apoyen nuestra petición».

Larramendi considera que esta demanda «es una necesidad que tarde o temprano tiene que ser atendida, porque los tiempos actuales así lo reclaman, como en su día ocurrió con la autovía». Añadía que la reivindicación se ciñe a incorporar en el proyecto del nuevo hospital la instalación de una unidad de radioterapia satélite. Se trata, según aclaraba, de un equipamiento más pequeño y de mucho menor coste que la unidad central de Zaragoza, pero de la misma eficacia.

La unidad oncológica evitaría los largos y penosos desplazamientos que los pacientes deben realizar actualmente para recibir en Zaragoza el tratamiento terapéutico necesario. Los enfermos de cáncer efectúan en estos momentos del orden de un viaje diario durante 4 y 6 semanas a la capital aragonesa, que se verían reducidos a solo uno al mes en caso de disponer de servicio de radioterapia el futuro centro hospitalario de Teruel.

Mejor transporte

Joaquín Larramendi reconocía que últimamente se ha mejorado el transporte sanitario a raíz de poner en marcha la campaña, pero sostiene que sigue siendo una medida insuficiente. «El viaje continúa siendo lamentable –explicaba el presidente de AECC–, porque lo hacen personas que sufren un deterioro por su enfermedad y cuyos beneficios tras el tratamiento salen perjudicados por un viaje que comienza a las 8 de la mañana con regreso a las 3 de la tarde».

Los promotores de la campaña esperan que el consejero Sebastián Celaya conteste a sus requerimientos convocando una reunión ante la abrumadora respuesta de los ciudadanos. «Alguna respuesta tendrá que dar. No puede ignorar a tantas personas», comentaban.

Celaya ha expresado en alguna ocasión la intención de su Departamento de reservar en el nuevo hospital un espacio «para incorporar un búnker para radioterapia». No obstante, se ha referido a la necesidad de que el hospital esté terminado para poner el marcha el equipamiento.

La petición de los dos colectivos tropieza, sin embargo, con el gran retraso que acumula la tramitación del nuevo hospital de Teruel, un edificio proyectado en los terrenos del Planizar desde hace 12 años.

Tras dos modificados del proyecto, una adjudicación fallida y la explanación de los terrenos, que costó dos millones de euros y que se deteriora por falta de uso, la construcción del hospital se mantiene bloqueada.