Las tormentas descargaron con fuerza en otras zonas de Aragón

Las tormentas de verano que barrieron este miércoles toda la Comunidad descargaron con fuerza en las Cuencas Mineras, el Maestrazgo y el Matarraña.

Montalbán, con 26 litros por metro cuadrado, fue la localidad turolense que más de precipitaciones registró, según informó Rafael Requena, delegado de la Agencia Española de Meteorología (Aemet) en Aragón. El alcalde Carlos Sánchez explicó que la lluvia produjo "algún arrastre", pero fue de menor intensidad que la del pasado domingo cuando cayeron 35 litros por metros cuadrados que dejaron mucho barrio en las calles y obligaron a intervenir en algún garaje.

Sí provocó inundaciones la intensa lluvia en Utrillas, causando graves daños en cuatro garajes cercanos al río Moral, que bajaba con fuerza debido al temporal, según explicó Joaquín Moreno, el primer edil. También fue necesario actuar en los sumideros, que quedaron colapsados por las hojas de árbol que arrancó la tormenta.

El abundante granizo que cayó en las Cuencas Mineras afectó, también, al campin Las Cabañas de Martín del Río. Pedro Galindo, el gerente, relató que en las instalaciones cayó bastante agua, pero minimizó las afecciones en el complejo, donde en esos momentos solo se encontraba una pareja alojada en un ‘bungalow’.

En la Comarca del Maestrazgo, el granizo "del tamaño de una fresa" que se recogió en Iglesuela del Cid afectó a los cultivos de cereal. Fernando Safont, el alcalde, indicó que los daños no fueron graves.

La lluvia dejó 24 litros por metro cuadrado en Castellote, mucha agua, pero poco granizo en unos 20 minutos, según explicó el primer edil, Ramón Millán. Sí vio que en el pantano de Santolea, que se acerca a Cantavieja, el granizo había dañado algunos campos de cebada y de vid.

A pesar de la intensidad, el subdelegado del Gobierno en Teruel, José Ramón Morro, señaló que no se había registrado ninguna alarma de importancia en la provincia.

Otra de las tormentas, que fue la que al final llegó a Zaragoza, dejó lluvia y granizo en la Comarca del Aranda y Valdejalón. En Brea de Aragón dañó algunos jardines y los servicios municipales tuvieron que desatascar algunas alcantarillas. En la zona están acostumbrados a este tipo de precipitaciones y a los daños que dejan a su paso. Una de las que cayó el año pasado provocó daños valorados en 70.000 euros, que salieron de las arcas municipales sin ninguna ayuda institucional más, según recordó Raúl Gracia, el alcalde.

El toro de Osborne, sin cabeza

Uno de los iconos de las carreteras aragonesas también se vio afectado por la fuerte tormenta. El toro de Osborne de Alfajarín perdió literalmente la cabeza como consecuencia del viento y el granizo. El alcalde del municipio, Jesús Vicén, relató además la caída de "varias farolas y árboles", así como "unas cubiertas que volaron a la entrada del pueblo" y dañaron algunos vehículos. Otras localidades de la ribera izquierda del Ebro también sufrieron la violencia de la tormenta, como La Puebla de Alfindén o Pastriz. De hecho, en la carretera CV314 que comunica Movera y Pastriz se desplomaron árboles en la carretera que obligaron a suspender el servicio público de autobús y obligaron a los conductores a extremar la precaución.

Los bomberos de la Diputación recibieron igualmente llamadas por roturas de postes eléctricos, ramas y achiques de agua en Nuez de Ebro.

El cuadrante noreste peninsular es la zona donde más tormentas se registran en todo el país. La peculiaridad de las de este miércoles, según explicó Rafael Requena, fue que en el caso de la de Zaragoza "pasó justo por encima de la ciudad", aunque en un principio daba la impresión de que se dirigía hacia las Cinco Villas.