Trashumancia equina para recuperar las vías pecuarias

Noventa caballos de distintos ganaderos han recorrido caminos y senderos para llegar a la laguna turolense del Cañizar tras haber pasado el invierno en parajes valencianos.

Los pastores han guiado a los caballos por las vías pecuarias que comunican los humedales de Valencia y Teruel.
Los pastores han guiado a los caballos por las vías pecuarias que comunican los humedales de Valencia y Teruel.
Roberto Rubio

Recuperar la trashumancia equina y conservar las vías pecuarias, un patrimonio de incalculable valor que está cayendo en el olvido, son algunos de los fines de la asociación La Dula de la laguna del Cañizar, que cuenta con 90 caballos propiedad de distintos ganaderos cuya reserva natural se sitúa en este humedal entre las localidades turolenses de Cella y Villarquemado recuperado en 2009 tras tres siglos desecado por la acción del hombre.


La manada acaba de llegar a la laguna turolense tras haber pasado la invernada en los ríos y pantanos de la Comunidad Valenciana. En este estanque a medio camino entre Cella y Villarquemado permanecerá hasta diciembre, pastando para alimentarse a la vez que elimina el carrizo y otras plantas invasoras del entorno. Para ello, los caballos han recorrido durante 10 días los caminos que unen ambos humedales de Teruel y Valencia.


Para desarrollar esta labor reguladora de la vegetación autóctona, se necesita ganado de gran porte, capaz de comer plantas de considerable altura y abrirse paso con facilidad a través del cañar. Los caballos, además, tienen que estar acostumbrados a pastar libremente en zonas de baja calidad forrajera y a soportar los repentinos cambios climáticos del territorio. Aún hay más. Deben adaptarse a la presencia humana y a los desplazamientos por vías pecuarias. Se trata de condiciones difíciles de conjugar en la cabaña ganadera peninsular que, sin embargo, reúne la manada de La Dula.


El vicepresidente de La Dula y propietario de una parte de los caballos, Emilio Izquierdo, es un enamorado de la trashumancia equina y explica que, aunque económicamente no le resulta rentable recorrer cada seis meses con su yeguada el corredor natural que comunica Teruel y Valencia, “emocionalmente” le compensa, y mucho. “Esto es puro romanticismo, pero no me importa. Me apasiona la vida al aire libre, el ejercicio saludable y la convivencia entre quienes conducimos a los caballos; con eso me basta”, afirma.

Única en España

Izquierdo destaca que La Dula de la laguna del Cañizar es la única asociación en España, y probablemente en el mundo, que realiza trashumancia equina entre dos comunidades autónomas. El grupo cumple 7 años desarrollando esta tradicional actividad que pone en valor la red de vías pecuarias que existe en el país, un entramado de senderos que permite a los trashumantes recorrer los más variados paisajes al estilo de los antiguos ganaderos.


Guiados por los pastores, los caballos partieron a finales de junio del paraje valenciano 'Cordel de los Rincones' y tomaron la vereda de Losa al Villar del Arzobispo, haciendo noche en el 'descansadero de la Loma del Villar'.


Aún en territorio levantino, siguieron por el 'Cordel de los Clérigos' en dirección a la zona de Artaj, en el término de Andilla, pasando la noche en el barranco de la Tejería. Entraron en la provincia de Teruel por la Fuente de Teresuela y la Sierra El Toro, adentrándose después en la Sierra de Javalambre para cruzar los términos municipales de Abejuela, Sarrión y La Puebla de Valverde.


No terminó ahí el curioso periplo, un auténtico espectáculo de ganadería, pues la manada siguió por las poblaciones de Los Cerezos, Los Olmos, Cubla, Villastar y Cella, hasta llegar a su destino en la Laguna del Cañizar.


Por el camino, “aire puro, naturaleza a raudales, comida con compañeros y aventura”, destacó Emilio Izquierdo.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión