CRÍTICAS POR IMPEDIR EL BAÑO

Tensión entre manifestantes y policías en el "gran salto" al río

Las Fuerzas de Seguridad controlaron el baño colectivo en el Ebro, acto que cerró el Foro Mundial de las Luchas del Agua

La Policía Nacional estuvo ayer en el salto al río Ebro de un centenar de participantes en el Foro Mundial de las Luchas del Agua, pertenecientes a asociaciones como VoluntaRíos o Nueva Cultura del Agua. La razón principal argumentada por la Delegación del Gobierno para supervisar esta actividad se fundamentó en la seguridad de los bañistas. Alrededor de la una de la tarde, un centenar de personas se habían reunido en la playa de Helios, bajo el Puente de La Almozara, para ejercer lo que consideraron "un derecho legítimo" en lo que se identificó como una "fiesta de los ríos".


La Delegación del Gobierno prohibió a lo largo de la pasada semana la celebración de este acto en la playa de La Almozara, de acuerdo con el plan de seguridad de la Exposición Internacional. De esta manera, el baño colectivo en el Ebro se trasladó aguas abajo, lugar donde sí estaba permitido por las autoridades, y donde pudo llevarse finalmente a cabo.


El salto simbólico a los ríos, conocido como "Big Jump", es una iniciativa a nivel europeo que pretende que los poderes públicos protejan debidamente los espacios fluviales. Fue precisamente este el alegato principal de los manifestantes que en todo momento, junto al Ebro, expresaron su descontento por la presencia policial.


Una veintena de agentes identificaron a varios participantes y vigilaron estrechamente el acto, lo que motivó malestar entre los manifestantes y hasta algunos momentos de tensión.


Los asistentes mencionaron repetidamente la necesidad de "recuperar el Ebro como espacio de baño". Pero también hubo quien llegó a retar a los policías a quitarse la ropa y a nadar en el río junto a los propios manifestantes.


Emilio Gastón, ex Justicia de Aragón, participó en este "Big Jump", en el que denunció públicamente que los ríos "todavía no son libres" y añadió que resulta "lamentable" que sea necesario "obedecer normas que son vergonzosas".


El presidente de la Red Europea de Ríos, (European River Network) e ideólogo de esta reivindicación, Robert Epple, destacó que esta medida solamente "pretende cumplir la directiva europea de protección de los ríos". En la misma línea, el presidente de Coagret (Coordinadora de Afectados por Grandes Embalses y Trasvases), Julián Ezquerra, expresó la necesidad de escenificar este baño en el Ebro para "celebrar con los hermanos de los ríos de Europa la garantía en la calidad de los ríos".


Algunos gritos de "delegado, dimisión" ante la mirada atenta de los efectivos policiales impusieron un mayor cariz reivindicativo a este baño en el que miembros de asociaciones de países como Noruega, Suecia y Australia pudieron compartir con los colectivos locales experiencias para defender el cuidado y la protección de los ríos. Antes y después de este "Big Jump", que desde la organización esperan repetir hasta el 2015, la animación y la comida popular en el parque de San Pablo, en la ribera opuesta del Ebro, marcaron una mañana festiva, aunque también contestataria.