RESTAURACIÓN

Solo han sobrevivido siete de las once escenas

El abandono que sufrió la Cartuja tras la Desamortización hizo que se perdieran cuatro pinturas originales de Goya.

Solo siete de las once pinturas que adornan la iglesia del monasterio de la Cartuja de Aula Dei son originales de Goya. El pintor, según los historiadores del arte, recibió el encargo de realizar once escenas de la vida de la Virgen en 1773, siendo prior Félix Salcedo. A las puertas del templo pintó 'San Joaquín y Santa Ana', y posteriormente siguió con el 'Nacimiento de la Virgen', 'Desposorios de la Virgen y San José', 'Visitación de María a su prima Isabe', 'La Circuncisión', 'La Adoración de los Reyes Magos' y la 'Presentación de Jesús en el templo'.

 

A ellas hay que añadir cuatro escenas más, que se arruinaron y rehicieron Pablo y Amadeo Buffet en la primera década del siglo XX. Los cartujos le dieron a Goya el tema que debía plasmar en los muros, no en vano habían dedicado el altar mayor a la Ascensión de la Virgen.

 

El pintor de Fuendetodos realizó las once escenas pero, luego, el avatar del templo, que fue desamortizado y estuvo abandonado durante décadas, hizo que sufrieran serios daños o, incluso, se perdieran para siempre.

 

Cuando el templo fue comprado por los cartujos franceses en 1903, decidieron emprender la restauración del conjunto, tarea que encomendaron a los mejores pintores de París en aquella época, los hermanos Buffet. Ellos, además de restaurar las pinturas, recrearon las arruinadas.

 

Pese a tratarse de una obra de juventud, los especialistas destacan que el conjunto tiene un aspecto monumental y académico, a caballo entre el barroco y el clasicisimo que debían querer los cartujos para su iglesia.

 

Todos los historiadores coinciden en que las escenas más interesantes, aquellas en las que Goya deja impronta de su genio, son los 'Desposorios de la Virgen', 'La Purificación' y 'La Adoración de los Reyes Magos'. Según los restauradores Carlos Barboza y Teresa Grasa, Goya se autorretrató en 'El Nacimiento de la Virgen': es el único personaje de todo el conjunto que mira directamente al espectador.