El titular del Juzgado de Instrucción 2 de Jaca ha rechazado la petición de la familia del alcalde del núcleo pirenaico de Fago (Huesca), Miguel Grima, asesinado de un disparo en enero de 2007, de suspensión cautelar de nuevos episodios de la serie de TVE sobre el crimen.

En su resolución, el instructor del caso, Ángel Manuel de Pedro Tomás, afirma que la decisión de no atender la petición de suspensión cautelar no afecta al contenido del recurso de reforma interpuesto contra un auto del pasado día 10 que descartaba la paralización de la serie.

El recurso de reforma fue interpuesto el pasado viernes por el letrado de la familia, el abogado zaragozano Enrique Trebolle, que incluía en su escrito una petición de suspensión cautelar de la serie la espera de una decisión en firme en relación a los eventuales recursos a plantear contra el referido auto.

En contestación a esta petición, el instructor asegura que aunque "no procede" estimar la solicitud de suspensión, su resolución no cierra el camino a nuevas acciones a adoptar con "celeridad" por la familia de la víctima ni a su derecho de solicitar amparo en nuevas instancias judiciales.

En su recurso,  el abogado expresa su disconformidad con la primera decisión del instructor de descartar la prohibición de la serie y argumenta, en contra de los criterios del juez, que no se trata de atentar contra el derecho a la libertad de expresión sino de proteger un procedimiento penal en curso.

Argumenta el letrado, sin embargo, que la libertad de expresión no puede ser "omnímoda y sin límites", y recuerda que en el sistema procesal español deben primar principios procesales "que se han respetado en los siglos XIX y XX y que se han de respetar en el XXI si no se quiere hacer del proceso penal una escenografía" en la que se pueda actuar por "conveniencia" o por "razones crematísticas".

Alerta, además, contra la creación de un precedente "peligroso" que permita la emisión de series con apariencia de ficción que recreen hechos reales mientras se lleva a cabo la instrucción de los casos respectivos.

Grima murió el mes de enero de 2007 en la carretera que une los núcleos de Fago y Majones, víctima de un disparo efectuado con una escopeta cargada con postas que presuntamente realizó Santiago Mainar, detenido unas semanas después como presunto autor del crimen.