UNIVERSIDAD

Profesores y alumnos de Letras lanzan una campaña contra el retraso de las obras

Circulan por correo electrónico fotos de las carencias de la Facultad, que no será rehabilitada por falta de fondos hasta 2012.

A nadie le sorprende ya que en la Facultad de Filosofía y Letras haya goteras cuando empiezan las lluvias. Tampoco que los desconchones, humedades y grietas pueblen aulas y despachos. Ni siquiera que las ventanas no cierren y se pierda la cuenta de los rodapiés y azulejos que faltan. Pero esta forzada costumbre a las carencias del edificio no se acompaña de resignación. Profesores y alumnos de uno de los centros decanos de la Universidad de Zaragoza están cansados de esperar unas nuevas infraestructuras que una vez más, vuelven a dilatarse en el tiempo.


La Facultad se quedará sin la rehabilitación prevista para este curso por falta de presupuesto y deberá aguardar hasta al menos 2012 para ver los primeros trabajos. Ante esto, sus miembros han hecho circular a través de correo electrónico una presentación en power point para denunciar las condiciones en las que seguirán durante varios cursos más y que son incompatibles con la calidad de la docencia que allí se imparte.


"¿I+D+i: Imaginaban Desidia tan Inaudita?", critican en el documento que ha sido enviado a docentes y alumnos del centro y de otras facultades. "Hay rumores, pero no sabemos con certeza quién es el autor. Se ha difundido muy rápido, algo lógico con el malestar que ha creado la noticia del retraso en las obras", explicaron fuentes de la Facultad. La presentación de 'power point' incluye fotografías recogidas en los últimos meses en las que se ven desde ventanas sin manillas o con bisagras rotas, pintura y azulejos desprendidos o enchufes colgando, entre otros desperfectos. A esto se suma la falta de espacio que limita las posibilidades del centro y dificulta su adaptación a las metodologías que conlleva Bolonia: aulas pequeñas para grupos reducidos, despachos para tutorías...


El plan de mejora y ampliación de la Facultad de Filosofía y Letras, que además de reformar íntegramente el edificio antiguo prevé la construcción de uno nuevo en los terrenos que ahora ocupa el pabellón de Filología, se presentó en mayo del 2006, tenía un coste de 17 millones y se pretendía que estuviera terminado en el 2010, en el 2011 como tarde. Desde entonces, el Rectorado lo ha ido posponiendo debido al escaso presupuesto, que ha obligado a los campus a hacer un importante ejercicio de austeridad: ha habido que eliminar asignaturas optativas y de libre elección con pocos alumnos, reordenar el mapa de titulaciones para evitar que hubiera carreras con menos de diez matriculados, recortar los gastos de representación y adoptar medidas de ahorro energético (cambiar luminarias y sistema de climatización), entre otras medidas.